La Dirección General de Aviación Civil (DGAC) determinó que la Empresa Municipal Aeropuerto y Zona Franca del Distrito (Corpaq) debe cumplir siete condiciones técnicas en la construcción del nuevo aeropuerto.
Esto está determinado en la Resolución 074 que autoriza la construcción de Tababela. Este documento fue entregado luego de cinco años que se iniciaran las obras en la terminal aérea.César Posso, gerente de Corpaq, explicó que estos requerimientos se deben cumplir para obtener la licencia de operación, segundo documento indispensable para habilitar el aeropuerto. Luego de obtener esa licencia se deberá proceder a la certificación final de la terminal de Tababela.
El primero y el segundo pedido de la DGAC, estipulados en el artículo 4 del documento, tienen que ver con la revisión de los capítulos 1, 2, 3, 4 y 9 del plan maestro del nuevo aeropuerto. También se solicita revisar este documento antes de la operación y habilitación de Tababela. Para cumplir con este requisito, la autoridad aeronáutica ecuatoriana dio como plazo hasta agosto de este año.
El tercer y cuarto condicionamientos que expone la DGAC en el documento firmado por el comandante Roberto Yerovi, director general de Aviación Civil (e), es la certificación del personal técnico, del equipamiento y los datos meteorológicos actualizados del lugar de la construcción. Se pide además que se efectúen los estudios de la presencia de vientos cizallados.
Mónica Valdiviezo, técnica del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), afirmó que los vientos cizallados son aquellos que cambian de dirección. Por ejemplo, cuando los vientos que van de norte a sur cambian su sentido repentinamente.
Posso explicó que esto no sería un problema en Tababela, porque estos vientos se producen cuando hay obstáculos como edificios o vegetación. “Pero como el aeropuerto es nuevo no tenemos esos inconvenientes”.
La quinta y sexta observación se refieren a la implementación de equipos y ayudas de la navegación aéreas adicionales a las que se tenían previstas en un inicio. Asimismo, la activación de los programas de entrenamiento, instalación y pruebas operacionales de los sistemas para la navegación aérea.
La última observación del ar-tículo 4 de la Resolución señala que también se debe realizar la mitigación de la franja de la pista que da a la quebrada de Santa Rosa. Esta ladera está ubicada en la parte norte del aeropuerto.
El gerente de Corpaq señaló que en este punto se cumplirán las normas establecidas por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI). “Esta entidad hará una excepción con el nuevo aeropuerto, pero esto no significa de ninguna manera que la terminal sea insegura”.
El alcalde Augusto Barrera señaló que estos elementos de carácter técnico tendrán que ir puliéndose para cumplir con lo dispuesto con la DGAC.
La Resolución plantea que el seguimiento y estricto cumplimiento del documento se encargarán las unidades administrativas de aeropuertos, ingeniería electrónica, navegación aérea y meteorología de la DGAC.
Pero aún está pendiente la adquisición del licenciamiento ambiental para la construcción en Tababela. Este documento debe ser otorgado por el Ministerio de Ambiente. Ahora solo existe un permiso municipal.