El 5 de marzo, los asambleístas volvieron a sus labores. Lo hacían luego de una vacancia legislativa que comenzó el 10 y terminó el 28 de febrero. Fueron días que coincidían con el final de la campaña electoral y el feriado de Carnaval.
Pero a poco de finalizar el mes, solamente hubo una sesión de Pleno. Los sectores de oposición y del oficialismo señalan que, por el contrario, ha habido sesiones en las comisiones legislativas, además de los procesos de rendición de cuentas que deben cumplir.
Eso le hace a Pepe Acacho, representante de Morona Santiago por Pachakutik, jugar con el sonsonete: “La vacancia les salió vagancia o la vagancia les salió vacancia”.
Desde el retorno de las vacaciones, la Asamblea no ha aprobado ninguna ley, aunque tiene 22 en agenda para este período legislativo. El mismo legislador de Alianza País, Eduardo Zambrano, reconoció que “sí hay una baja” de la actividad parlamentaria, “pero en los próximos días esto comenzará a reflotar porque hay diferentes proyectos de ley a tratar”. Sin embargo, al cierre de esta edición, los asambleístas no recibieron convocatoria alguna.
En lo que va del año, tres leyes fueron aprobadas, según la comunicación oficial de la Asamblea: de Organización Territorial, el Código Orgánico Integral Penal y la Ley Orgánica para el Cierre de la Crisis Bancaria de 1999. Fue antes del 10 de febrero; desde el 5 de marzo, ninguna.
Además, en este año, 13 proyectos de ley ingresaron al Parlamento. De ellos, cinco ya recibieron la calificación del Consejo de Administración Legislativa (CAL) para su tratamiento. Y de estos, solo uno llegó a publicarse en el Registro Oficial el 20 de febrero: el de la crisis bancaria. Su autor es el presidente Rafael Correa y tuvo el trámite de “urgente en materia económica”.
Que esto ocurra no es algo que llame del todo la atención a Diego Salgado, representante de Creo por Pichincha. Para él, la Asamblea no tiene una agenda propia, sino que todo vendría por iniciativa presidencial: “ni siquiera hay una agenda que provenga de la mayoría, peor aún de la minoría opositora”.
Pero Salgado va más allá. Para él, la Asamblea no se mueve si no recibe órdenes desde Carondelet. Y acusa por esta inercia a que la mayoría legislativa aún trata de entender y recuperarse del resultado electoral del 23 de febrero. Por eso, en AP ya llevan dos talleres para analizar la enmienda o reforma constitucional que permita una ‘re-reelección’ de Rafael Correa.
Pero para Zambrano esto que Salgado señala como defecto sería más una virtud democrática, porque, “por primera vez en la historia”, los poderes Ejecutivo y Legislativo “trabajan de forma armoniosa, como debe ser una democracia”. Así esta Asamblea estaría sentando las bases futuras de un trabajo entre ambas partes del Estado.
“O más se preocupan por el interés de un caudillo que está por sobre el pueblo ecuatoriano porque nuestra responsabilidad es emitir leyes”, reflexiona Acacho.
Si es o no prioridad la reelección se debe, según Mary Verduga, representante de Alianza País por Santo Domingo de los Tsáchilas, porque “nos hacemos eco de lo que dicen los medios, aunque sí es algo que se esté discutiendo en AP”. O “una cortina de humo”, según el socialcristiano Luis Fernando Torres. Para el asambleísta tungurahuense, hay “arbitrariedades” que oculta este tema, como la aprobación de la obligatoriedad de la afiliación al IESS del trabajador independiente o el reglamento de construcciones que afilia al albañil, por ejemplo, que trabaje solamente un día en una obra.
“Hay prioridades; lo que no ha habido es pleno, pero eso no significa que la Asamblea no esté trabajando”, añade Verduga, para quien una legislatura no es buena porque aprueba más sino mejores leyes para cambiar las estructuras.
Entre estas leyes prioritarias se encuentran las de los Consejos de Igualdad, la de Tierras, la de Aguas. Además, según Ximena Ponce, de AP, también se discutió en su bloque oficialista una resolución, que deberá pasar por el Pleno, de apoyo a la democracia en Venezuela.
Dos leyes ya pasaron el primer debate: la reformatoria a la Ley del Futbolista Profesional y la de Prevención, Control y Sanción del Acoso, Intimidación o Violencia en los Centros de Estudio del Ecuador.
En contexto.
La vacancia legislativa fue vista, desde la oposición, como una necesidad del oficialismo para que sus legisladores apoyaran a los candidatos en las elecciones. Y aunque estuvo previsto que volvieran a sus curules el 28 de febrero, lo hicieron el 5 de marzo.