El pedido para decretar a la Legislatura como zona de seguridad tiene el objetivo de cambiar el sistema de la escolta (vigilancia) de la Asamblea.
Fernando Cordero, presidente de la Función, aseguró que se redacta una reforma a la Ley Orgánica de la Legislatura para que policías y militares sean los encargados de custodiar esas instalaciones. Es una tarea exclusiva de la Policía Nacional, pero desde los incidentes del 30 de septiembre pasado, los militares los han reemplazado.
Por ese motivo, Cordero pidió al presidente de la República Rafael Correa, que ampliara el estado de excepción decretado para Quito, el 9 de octubre pasado y que significaba la movilización de militares en la ciudad. Según Cordero, la intención es que la emergencia se amplía, pero que ahora solo se incluya como zona de seguridad a las instalaciones de la Asamblea y no a toda la urbe.
El estado de emergencia terminaba ayer a las 23:59 y su ampliación dependía de la emisión de un Decreto Ejecutivo. Hasta el cierre de esta edición no existió una notificación oficial desde la Presidencia de la República.