La democratización del acceso a la tierra y el incremento de la productividad agrícola son los dos retos que el presidente Rafael Correa le encomendó a Javier Ponce Cevallos, el nuevo ministro de Agricultura que estuvo a cargo del Ministerio de Defensa hasta hoy.
Correa, durante la ceremonia de posesión de los nuevos ministros, dijo que Ponce concretará una viaje aspiración de la llamada revolución ciudadana y que, admitió, no ha logrado desarrollarse como él hubiera querido: el acceso a la tierra de los pobres del país.
Eso sí, Correa insistió, en que si bien la distribución de tierras es importante lo más importante es mejorar la productividad sobre todo en los sectores más pobres de la población.
Correa también posesionó al nuevo ministro de Defensa, Miguel Carvajal, a quien definió como alguien que se ha desempeñado excelentemente como funcionario militante y revolucionario.
Carvajal era viceministro de Agricultura. Pero fue sobre el tema agrícola sobre el que más habló el Presidente. Ahí admitió que el déficit de su Gobierno ha sido no avanzar a la velocidad esperada la distribución del acceso a la tierra.
Sin embargo, puso mucho énfasis en la necesidad de que esa distribución vaya acompañada de eficiencia y productividad. “Para romper los círculos de pobreza no es suficiente la justicia, lo primero es la productividad”, dijo el Presidente quien acusó a ciertas fuerzas, entre las que hay extranjeros, de pretender convencer a los sectores indígenas de que no cambien y que sigan con mecanismos de producción ineficientes.
En una ceremonia cumplida en la casa presidencial, Correa también posesionó a José Francisco Vacas como nuevo ministro de Relaciones Laborales, Doris Solíz como ministra de Inclusión Social, Richard Espinosa como ministro coordinador de Desarrollo Social, Augusto Espinoza como ministro coordinador de Talento Humano y a Viviana Bonilla como nueva gobernadora del Guayas.
El Primer Mandatario reiteró en su discurso su confianza en las nuevas autoridades y les pidió poner énfasis en la producción e investigación agrícola, en la calidad de la educación y en profundizar la agenda social.
“Todos somos ciudadanos de primera, tenemos los mismos derechos y las mismas oportunidades de desarrollo”, expresó el mandatario ecuatoriano al tiempo de pedir a sus ministros avances “con el sistema de equidad e igualdad y apoyar la economía popular y solidaria”. Adicionalmente, pidió a los nuevos funcionarios hacerlo rápido porque “la patria ya no tiene tiempo que perder”.
Al hablar de Ponce dijo que fue clave al defender la democracia durante la sublevación policial del 30 de septiembre del 2010 y que, como experto que dijo que es en desarrollo rural, sabrá cumplir con las tareas que le ha encomendado.
Ponce, por su lado, manifestó que la reestructuración es para “mantener la estabilidad y continuidad de los objetivos” del gobierno socialista de Correa. Esos cambios, según el propio funcionario, buscan “ratificar el compromiso de la revolución ciudadana”.
Más adelante habló sobre Miguel Carvajal quien asumirá el Ministerio de Defensa. En este punto no se extendió mayormente y dijo que la tarea encomendada es seguir ampliando la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas e involucrarla de forma eficiente en la guerra contra el crimen.
Según Correa, en todos los países de la región se ha comprobado que sin la participación de las FF.AA. no se puede vencer al crimen organizado.
Los ahora ex ministros Ximena Ponce, que estaba al frente de Inclusión Económica y Social, y Guillermo Solórzano, que conducía el de Talento Humano, continuarán colaborando en otros puestos del gobierno de la “revolución ciudadana”, de acuerdo con el propio mandatario.
La administración del gobierno ecuatoriano está conformada en la actualidad con 20 ministros de estado, a los que se suman 8 ministros coordinadores y 10 secretarías estatales que gozan de rango ministerial.