El secretario de la Administración Pública, Vinicio Alvarado, estuvo acompañado de varios funcionarios del Régimen durante la audiencia en contra de su ex compañera de Gabinete, Mónica Chuji, que empezó a las 14:15 de ayer.
Él la acusó de injurias calumniosas por haberle tildado como “nuevo rico”, durante una entrevista con este Diario. Se plantean tres años de prisión y USD 250 000 como indemnización.
Fernando Alvarado, Doris Soliz, Jaime Guerrero, Alexis Mera, Galo Mora y el presidente Rafael Correa llegaron para apoyarlo. Cada uno ingresó a la sala del Juzgado Décimo Cuarto de lo Penal de Pichincha junto con un nutrido grupo de asesores y guardaespaldas.
Esto mientras Mónica Chuji tuvo una discusión, pues no se le permitió ingresar con toda su delegación. Solamente el presidente de la Conaie, Humberto Cholango, y los asambleístas Diana Atamaint, Jerónimo Yantalema y Lourdes Tibán pudieron ingresar a la sala.
Durante la audiencia, que fue reservada, cada una de las partes tuvo 20 minutos para exponer sus argumentos y 10 para réplica. Así, los abogados de Alvarado indicaron como prueba la entrevista que EL COMERCIO le hizo a Chuji el 6 de febrero. Además, Alvarado sostuvo que se siente ofendido porque en las calles lo señalan con el dedo como un funcionario que se ha enriquecido, con ese argumento demostró su afectación.
Por su parte, el jurista Julio César Trujillo, defensor de Chuji, sostuvo que el proceso debe ser declarado nulo, pues las injurias a los altos funcionarios son un delito contra la administración pública y deben sustanciarse en un proceso de acción pública más no de acción privada.
A las 15:15 terminó la audiencia y ninguno de los ministros dio declaraciones. Pero Chuji contó que Alvarado admitió que es un hombre rico y próspero. “Nosotros ratificamos el derecho a la opinión pública”.
En cuatro días, el juez Wilson Lozada dictará una sentencia.