John Reimberg, ministro del Interior, explicó este martes 14 de octubre de 2025 en una entrevista con Radio Quito los detalles de la operación que llevó un convoy humanitario desde Quito hasta Imbabura.
El funcionario habló desde Otavalo y aseguró que la prioridad del Gobierno es reabrir las vías, mantener la paz y asistir a las familias afectadas por el paro nacional.
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Reimberg afirma que el convoy humanitario avanzó entre enfrentamientos a Imbabura
El ministro relató que el convoy partió desde Tababela con cerca de 100 vehículos, de los cuales 40 transportaban alimentos, medicinas y gas de uso doméstico. En total participaron 10 instituciones del Estado.
Durante el trayecto, la caravana fue atacada en el sector de La Esperanza, en Ibarra.
Según Reimberg, manifestantes lanzaron piedras y bombas molotov contra los vehículos. Una de ellas impactó en un blindado de las Fuerzas Armadas, pero el fuego fue controlado.
“La operación tomó cerca de una hora hasta que el convoy pudo continuar hacia Ibarra”, afirmó.
Ya en la noche, las autoridades arribaron a la capital imbabureña y sostuvieron una reunión para coordinar la entrega de los insumos.
En la madrugada del martes 14 de octubre de 2025, el convoy avanzó hacia Otavalo, donde nuevamente se registraron intentos de ataque.
Distribución gratuita de alimentos, medicinas y gas
Reimberg indicó que la ayuda humanitaria se distribuirá gratuitamente en los sectores más afectados. Incluye alimentos, medicinas, gas de uso doméstico y bonos para quienes registraron pérdidas económicas durante los días de paralización.
“El GLP se entregará sin costo y también se abastecerán las distribuidoras locales. La zona estará resguardada por militares y policías para garantizar la entrega”, dijo.
El ministro agregó que la población salió a recibir al convoy y que varios ciudadanos se ofrecieron como guardianes de la ayuda.
Estrategia y seguridad en Imbabura
El ministro explicó que la operación se planificó desde Ibarra hacia el sur como una maniobra táctica para evitar bloqueos. Afirmó que el Gobierno se quedará en la provincia “el tiempo que sea necesario” para abrir vías y mantener el orden.
“Vamos a operar desde aquí para garantizar que las carreteras se abran. La paz en Imbabura llega a partir de hoy”, señaló.
Reimberg advirtió que las pérdidas económicas por la paralización alcanzan 42 millones de dólares, afectando al turismo, comercio y floricultura.
Reimberg: ‘Nunca hubo un paro nacional’
El ministro sostuvo que las protestas se concentran únicamente en Imbabura y en los cantones del norte de Pichincha. “Nunca hubo un paro nacional. Esto fue un paro provincial”, dijo.
También afirmó que el convoy y las fuerzas del orden permanecerán en la provincia para restablecer la circulación y la calma. “Vamos a trabajar en aperturar todo lo que sea necesario para que pueda fluir la carga y la gente”, señaló.
Reimberg explicó el traslado de los detenidos por el ataque al cuartel policial
El ministro se refirió al caso de los ciudadanos acusados de incendiar un cuartel policial en Imbabura y explicó las razones por las que no fueron trasladados y siguen en una cárcel de la Costa.
“Ellos están en la cárcel. Cuando se planificó su traslado, supimos que existía el riesgo de que manifestantes intentaran liberarlos de forma violenta. Eso ponía en peligro la integridad de los detenidos y de la fuerza pública”, indicó.
Reimberg aseguró que la decisión buscó precautelar la seguridad en la provincia y en la ciudad. “Ciertos sectores incitan a estos actos de violencia, y eso no lo podemos permitir”, dijo.
Posición frente al diálogo y situación en Quito
Reimberg aseguró que el Gobierno mantiene la disposición al diálogo, pero sin condiciones políticas. “Nunca hemos cerrado los diálogos. Lo que no hemos aceptado es la violencia”, expresó.
Sobre la situación en la capital, el ministro dijo que “Quito está en paz y va a mantener la paz”. Confirmó que el contingente de seguridad continuará desplegado pese a las declaraciones del alcalde Pabel Muñoz, quien cuestionó la presencia de militares en la ciudad.
“Vamos a hacer todo lo necesario para proteger Quito y precautelar que nada suceda. El compromiso del Gobierno es asegurar la seguridad de los ciudadanos”, concluyó.