Patricio Terán / el comercio
En el Salón Amarillo de Carondelet se realizó la primera reunión de Gabinete ampliado entre ministros, secretarios de Estado y el Presidente.
Los nuevos ministros y secretarios de Estado acudieron el viernes 6 de enero al primer Gabinete ampliado del 2017 del Gobierno, en Carondelet.
Sandra Naranjo, vicepresidenta encargada, se sentó a la derecha del presidente Rafael Correa. Luisa González, nueva secretaria de la Administración, a la izquierda.
Uno de los primeros en llegar al Palacio fue César Navas, ministro coordinador de Seguridad. Él adelantó los temas que se iban a abordar.
“Vamos a tratar ciertos compromisos presidenciales que tenemos y que se deben cumplir. Vamos a analizar cómo va a ser el proceso de cierre del período de gobierno”.
En 43 días, el 19 de febrero, se realizarán las votaciones generales. Ese día se conocerá al sucesor de Correa quien trabajará con un equipo propio de ministros y secretarios.
Navas adelantó que las campañas políticas tendrán limitaciones en dos cantones de la provincia amazónica de Morona Santiago, que se encuentran en Estado de Excepción desde el 14 de diciembre del 2016.
El Ministro pedirá que se lo amplíe, por 30 días, para San Juan Bosco y Limón Indanza debido a que, considera, todavía no existen las condiciones de seguridad.
En ambas poblaciones no se podrán realizar concentraciones masivas en esta época electoral. “Los candidatos pueden hacer recorrido puerta a puerta, sin ningún problema”.
Los dos cantones se encuentran militarizados luego de enfrentamientos entre policías y personas que se oponen a la minería. Se registraron varios heridos y un fallecido.
Entre los nuevos ministros que llegaron a la cita estuvieron también Pedro Solines, quien reemplaza a Diego Fuentes en el Ministerio del Interior. La nueva ministra de Salud, Verónica Espinosa, que está en lugar de Margarita Guevara. Y el nuevo ministro coordinador de Política Económica, Diego Martínez.
Estos fueron los cambios más recientes dentro del gabinete de Correa tras el pedido de renuncias que hizo en diciembre del 2016.
El encuentro sirvió para pasar revista también a los temas pendientes relacionados con el terremoto del 16 de abril del año 2016.
El presidente Rafael Correa pidió celeridad para que se eliminen los albergues oficiales instalados tras el sismo en Esmeraldas y Manabí. El Mandatario quiere solventar este problema antes de que termine su período.
La Secretaría Técnica de Reconstrucción espera que se cierren el 30 de abril del 2017. Se prevé que hasta esa fecha ya se cuenten con más soluciones habitacionales o con nuevos bonos de vivienda.
“La disposición por parte del Presidente es que se orienten todos los esfuerzos para tratar de cerrar los albergues y que las personas reciban bonos o las soluciones de vivienda”, dijo Carlos Bernal, secretario técnico de Reconstrucción.
Al momento existen 24 campamentos en los que se encuentran 6 000 personas albergadas. Esto representa el 50% menos de la población que buscó refugio en los meses iniciales tras el desastre. Bernal puntualizó que en caso de que existan nuevos inconvenientes, la fecha de cierre podría retrasarse.
En el informe que presentó el funcionario, dijo que hay 13 000 viviendas reparadas y 2 000 nuevas en los sectores afectados por el terremoto.
El Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) y la Secretaría plantearon al Presidente cambios en la modalidad de entrega de los bonos de acogida. El dinero se entregaría directamente a las familias afectadas por el sismo y no a las acogientes.
El ministro de Comercio Exterior, Juan Carlos Cassinelli, planteó la repotenciación de Pro Ecuador, para tener mejores resultados en las exportaciones nacionales.
“Yo pienso que en la búsqueda de esos mercados internacionales, Pro Ecuador ha tenido un papel importante. Ha sido nuestro instituto de promoción de exportaciones y estamos proponiendo reforzarlo para que esté a la altura de las grandes expectativas que se tienen”, finalizó.