El fallido intento del correísmo de proponer la destitución del presidente Guillermo Lasso ratificó a la mayoría de oposición con la que el Gobierno tendrá que lidiar en los tres años que restan de su mandato.
El viceministro de Gobierno, Homero Castanier, agradeció este miércoles 29 de junio a las bancadas del Partido Social Cristiano (PSC) y la Izquierda Democrática (ID) por haber votado –junto con el oficialismo- en contra de la propuesta de Unes.
A su vez, en una entrevista para radio Quito, el funcionario reconoció que el escenario en la Legislatura “no va ser fácil” para el Ejecutivo.
La propuesta de destitución contra Lasso no alcanzó los 92 votos para ser aprobada, pero al haber sumado 80 votos a favor superó la mayoría absoluta (70) que se requiere en el Pleno para la aprobación de proyectos de ley o resoluciones.
“Con esta acción de haber activado un proceso de destitución del Presidente de la República, nosotros como Gobierno también lo asimilamos, lo entendemos y tenemos que dar un golpe de timón en ciertos temas, para tener también ese apoyo de legisladores frente a temas que les puedan interesar, en proyectos de ley, en iniciativas para sus regiones, provincias, pero no va a ser fácil, va a ser un caminar día a día”, señaló Castanier.
Como ocurrió en el caso Pandora Papers, cuando se dio el primer intento de sacar del poder a Lasso, el bloque correísta, que controla 47 curules, se volvió a juntar con Pachakutik, disidentes de la Izquierda Democrática (ID) e independientes.
El presidente, Virgilio Saquicela (ind.), junto a Darwin Pereira (PK), Ronny Aleaga y Johanna Moreira (exID), que componen la mayoría en el Consejo de Administración de la Legislatura (CAL), votaron por la destitución. Solo la vicepresidenta, Yeseña Guamaní, y la vocal Nathalie Arias (Creo), no lo hicieron.
“Voto a voto”
A pesar de que votaron en contra de esta moción, el Partido Social Cristiano (PSC) y la Izquierda Democrática (ID) insistieron en que no se trató de un pacto, sino de la defensa de la institucionalidad y la estabilidad del país.
El politólogo Giuseppe Cabrera consideró que esta votación también pudo ser producto de cálculos electorales de estos partidos, y afirmó que “no restituye para nada las relaciones del Gobierno con estas bancadas”, cuyos líderes han sido descalificados por el presidente Lasso.
“Va a seguir existiendo un relacionamiento tenso y marcado, más bien, por agendas coyunturales, determinadas y específicas dependiendo de la votación. En cada votación el Gobierno tendrá que pelear voto a voto los proyectos que quiera pasar”, señaló.
De hecho, así lo confirmó la solicialcristiana Marjorie Chávez. “El voto contra la destitución no puede entenderse como un apoyo a un Gobierno indolente e incapaz. Yo he apoyado la institucionalidad democrática, y no he negado los errores del Gobierno. El Presidente y su equipo deben rectificar”, subrayó
La decisión del bloque de la ID tuvo el respaldo de algunos líderes de ese partido como los exdiputados Guillermo Landázuri, Oswaldo Molestino, Patricio Jijón, Guillermo Haro, Reinaldo Páez, entre otros.
“El voto contra la destitución no puede entenderse como un apoyo a un Gobierno indolente e incapaz. Yo he apoyado la institucionalidad democrática, y no he negado los errores del Gobierno. El Presidente y su equipo deben rectificar”, subrayó la socialcristiana Marjorie Chávez.
Tras este revés, el correísmo anunció que buscará la salida de Lasso por la vía de la revocatoria del mandato. Mientras, Pachakutik no se ha pronunciado sobre Guadalupe Llori, Gisela Molina y Ricardo Vanegas, que no acataron la decisión del bloque de votar por la remoción del Jefe de Estado.