La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) planteó 10 pedidos al Gobierno para deponer las movilizaciones, que ya dejan millonarias pérdidas. Para analistas consultados por este Diario algunos de sus planteamientos son justos y deben ser atendidos por el Gobierno. Pero otros son inviables, contradictorios y nacen -afirman- del desconocimiento de cómo funcionan las finanzas públicas.
Pedidos razonables
Precios justos en productos del campo; presupuesto urgente para la salud y educación, y respeto a la Educación Intercultural Bilingüe estarían entre los pedidos coherentes y viables, señaló Magdalena Barreiro, exministra de Economía.
“El sector agrícola debe ser atendido por el Gobierno; este debería pensar en un tipo de subsidio, aunque sea temporal, para la urea, que es un fertilizante necesario para la gente que trabaja en el campo”, sostiene la exministra.
Por otro lado, cree que el Gobierno se ha demorado en dar soluciones a problemas urgentes como el abastecimiento de medicinas.
Alberto Acosta Burneo, analista económico, coincide en que los reclamos en salud son justos y necesarios los cambios. “La población está reclamando por la baja calidad en los servicios de salud. El Gobierno debe ir a un cambio radical de la política pública”.
Empleo y derechos laborales, generación de políticas públicas de seguridad y protección también son pedidos justos y su ejecución debería ser inmediata, coinciden.
Para Jaime Carrera, del Observatorio de la Política Fiscal, el pedido de no privatizar servicios es una solicitud política, ya que esto está prohibido en la Constitución. Lo mismo ocurre con el respeto a los 21 derechos colectivos, que incluye la justicia indígena.
Tres pedidos inviables
La Conaie pide que el galón de diésel baje de USD 1,90 a USD 1,50. En el caso de la gasolina extra y ecopaís, que pasen de USD 2,55 a USD 2,10. Estos derivados están congelados y no han tenido incrementos desde octubre pasado. Pero, según el grupo, el precio es demasiado alto y es la causa de la inflación en el país. Para Carrera, esto es inviable ya que los ingresos del Estado no alcanzan para cubrir los gastos, generando ya un déficit de más de USD 2 300 millones. Y este aumentaría al cubrir más subsidios a los combustibles.
El déficit fiscal se produce cuando los gastos del país son mayores que los ingresos. Y para cubrir todas sus necesidades el Estado debe endeudarse. Según el Ministerio de Finanzas, las necesidades de financiamiento para este año superan los USD 6 500 millones.
El Ecuador produce petróleo, pero importa derivados como el gas, diésel y gasolina, a precios que han escalado por el conflicto Rusia-Ucrania. Mientras más cuesta el crudo, más alto son los precios de estos combustibles. Según la ejecución presupuestaria, en los primeros cinco meses del año, el Ecuador pagó USD 520 millones para subsidiarlos.
Para Alberto Acosta Burneo este pedido está mal enfocado y el Gobierno debería pensar en focalizar un subsidio para el transporte público masivo.
La solicitud de moratoria de un año de préstamos en el sistema financiero también es inviable, ya que el dinero captado por bancos, cooperativas y mutualistas es de los depositantes.
Para Marco Rodríguez, presidente Ejecutivo (s), de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca), no es posible considerar una moratoria generalizada, ya que “la Constitución obliga a cuidar los recursos de los depositantes”.
En tanto que el pedido de eliminar la minería resulta contradictorio porque el Estado necesita muchos recursos para funcionar. Este 2022, las exportaciones mineras llegarían a USD 2 600 millones, según el Ministerio de Energía. Lo que se debería pedir es una minería responsable con el medioambiente, en la que participen las mismas organizaciones opuestas, señaló Jaime Carrera.