Redacción Sociedad
Una a una las huellas dactilares de la mano izquierda aparecieron en la pantalla de la computadora. Así quedaron registradas como parte de los datos personales de Katherine Maza, en el nuevo sistema digital de cedulación.
A diferencia de antes, Katherine esta vez no tuvo que manchar sus dedos con tinta negra. Solo los colocó sobre un pequeño lector digital para que sus huellas sean grabadas en una memoria.
La pequeña, de 10 años, fue una de las personas que ayer obtuvieron la nueva cédula de identidad. Entre ayer y hoy se realizó una fase de prueba en el Registro Civil de Turubamba.
Y para mañana está prevista la apertura oficial de la emisión de este documento. Para eso se atenderá a través de 25 ventanillas habilitadas en el pabellón remodelado en la dependencia de Turubamba, en el sur de Quito.
El lunes 5 empezará un proceso similar en las oficinas de la Naciones Unidas, en el norte de Quito. Además, de acuerdo con el cronograma, desde mayo se ampliará la entrega con 50 unidades móviles y otras 36 oficinas en el país hasta finales del 2010.
Esto es parte del Plan de Modernización del Registro Civil, de acuerdo con Marco Cazco, asesor de la Dirección Nacional. En su ejecución total, hasta el 2011, se invertirán alrededor de 100 millones de dólares. Incluye remodelación de locales y la digitalización de más de 100 millones de hojas de registros.
Mañana lea más en la sección Sociedad de la edición impresa de EL COMERCIO