Redacción Guayaquil
Pamela Marshal recorrió el pasado miércoles la feria Hábitat 2009 que se realizó en Guayaquil. En algunos proyectos urbanísticos la venta se hacía en planos.
En otros, se mostraban maquetas o fotografías de las urbanizaciones ya construidas.
En cada módulo le explicaron que para acceder a una vivienda se requiere el 30% del costo, financiado directamente por la inmobiliaria. Ahí surgió una duda:
¿quién le garantiza que ese dinero se destinará para la construcción de la vivienda?
Angélica Álvarez, asesora de Terrabienes, señala que lo primero que un cliente debe preguntar es la trayectoria de la inmobiliaria. Algunas preguntas básicas son: ¿cuántos años está en el mercado?, ¿cuántas urbanizaciones ha construido? Y, lo principal, saber la opinión de otros clientes que tienen su casa.
Hace cuatro meses, en Guayaquil, se conoció de un supuesto caso de estafa masiva de la inmobiliaria Mancheno, que construye el plan Valle Alto (vía a la Costa). Los clientes reclamaron en la Defensoría del Pueblo y en la Fiscalía por el incumplimiento en la entrega de las viviendas, pese a que dieron la entrada. El caso aún está en proceso legal.
Rodolfo González, gerente de Construyendo B&G (proyecto Mocolí Garden), dice que el caso de la inmobiliaria Mancheno respondió a una mala negociación de la tierra desde los promotores.
“Cuando se construye un proyecto, este se desarrolla en paralelo con el dueño de la tierra. Se pacta un precio según la plusvalía. Se paga el terreno, cuando los clientes confirman la compra de una casa. En ese caso, el dueño de la tierra exigió el prepago antes de construir”.
Por ello, dice que lo primero que debe hacer un cliente es saber si los terrenos que se ofertan son propios o tiene gravamen.
Gustavo Pereira Albán, presidente de la Asociación de Corredores de Bienes Raíces del Guayas, explica que el valor de la entrada que se negocia con el
constructor permite el desarrollo del plan de vivienda. “Es lo que se llama el punto de equilibrio, el constructor no inicia las obras hasta que no tenga por lo menos la mitad vendida o reservada”.
Patricia Albán, gerenta de Ventas de Ciudad Celeste, considera importante que se revise el contrato antes de firmarlo. En el caso de este proyecto, en el documento se especifica la forma de pago, la urbanización que se escoge, el modelo de casa… Además, no tiene un reajuste de precios.
“Se hace un crédito directo de la entrada. Y se especifica que si el cliente no puede continuar con la negociación y ya ha pagado un monto significativo puede quedarse con el terreno para luego construir la casa cuando tenga una mejor situación”.
Para María José Troya, presidenta de la Tribuna del Consumidor, la entrega de cualquier dinero debe tener un respaldo legal. Elevar a escritura pública los contratos de compraventa o incluso las promesas de compra es una garantía. Por ser un título ejecutivo hay un trámite más ágil, en caso de que haya alguna
disputa por incumplimiento.
María Herrera, presidenta del Colegio de Economistas de Pichincha, recalca la importancia de utilizar el mecanismo de escritura pública.
La información es primordial
Si ha recibido un folleto informativo verifique con el vendedor si todo lo que dice esa publicación coincide con la información que ofrece la empresa. Conozca los modelos, revise maquetas y planos.
Cuando conozca la oferta de la inmobiliaria es importante visitar las oficinas de ventas y donde se construirá el proyecto, para constatar la información de forma física.
Antes de dar la cuota de entrada o de reserva de la casa, verifique la trayectoria de la empresa, ya sea en la Superintendencia de Compañías, en la Cámara de la Construcción e incluso en el Registro de la Propiedad. Allí puede verificar si hay o no algún litigio con el terreno o la vivienda que se ofertan.
Elabore una hoja de cálculo que contenga el monto del crédito, la tasa de interés del crédito, el plazo, el monto de los pagos mensuales (si serán a principio de mes, a mediados o al final del mes), qué tanto capital y qué monto de interés se irán cubriendo en cada pago. Llévese a casa dicha hoja, revísela con un
familiar o un amigo que sepa de estos detalles.
Antes de escoger un modelo verifique sus necesidades. ¿Cuántos dormitorios necesita?, ¿cuántos baños?, distribución, espacio, etc.
Es importante hablar con el vendedor para aclarar cualquier duda que tuviera sobre las características de construcción, materiales, acabados y otros detalles.