El Gobierno controlará el expendio de gas de uso doméstico a partir del 2013. Ayer, el presidente Rafael Correa anunció que desde el próximo año, la compra de gas de uso doméstico se realizará con tarjetas.
Estas, permitirán controlar la venta en grandes cantidades, dijo el Primer Mandatario, en un programa de EcuadorTV.
“Son subsidios ineficientes que benefician más a los ricos que a los pobres (…) No es posible que haya gente que compre 20 cilindros (de gas) por mes para calentar el yacuzzi, el sauna, la piscina, y tengan que pagar un precio subsidiado”.
La Dirección Nacional de Hidrocarburos entrega el gas a los distribuidores a USD 1,47. Los distribuidores están autorizados a vender el cilindro de gas de 15 kilos a USD 1, 60.
La focalización del subsidio al gas es un tema que ha estado en la carpeta de los asuntos que deben ser resueltos por el Régimen, para racionalizar el consumo de los combustibles y atender a la población que tiene menos recursos. Correa aseguró que, con la medida, se espera que las bombonas se utilicen para fines adecuados y no, por ejemplo, para cisternas de piscinas, cocinas industriales, etc.
“El gas y la gasolina sí la consumen los más pobres. Sacar el subsidio a la gasolina significa que se incremente el transporte urbano y de víveres, la inflación”. Y agregó: “Lo que sí podemos hacer es controlar un poco el dispendio”.
La idea es poner límites al consumo, por familia, dijo Correa, quien aclaró que la implementación de este sistema estará lista en 2013 y cuenta con asesoría uruguaya.
“En este año podremos probar el sistema, y desde el 2013 las familias pueden comprar dos o tres cilindros de gas mensuales. Quien tiene que calentar la piscina con gas, que pague precio de mercado”, reiteró.