El seguro de vehículos se ha convertido en una alternativa para reducir el impacto financiero, ante un siniestro o robo. Para aprovechar sus beneficios es necesario conocer cómo funciona o, en caso de tenerlo, cómo utilizarlo.
Estos seguros son de contratación voluntaria. Cobran importancia por su utilidad y beneficios ante la alta siniestralidad que representan estos bienes. Según la Agencia Nacional de Tránsito, en lo que va del 2022 se han registrado 14 388 siniestros de tránsito.
¿Cómo funcionan?
Los seguros de vehículos se adquieren mediante la firma de un contrato con la empresa aseguradora. Este contrato se llama póliza. Ahí se establece la cobertura que tendrá el vehículo, acorde a las necesidades y presupuesto de su propietario. Algunas incluyen gastos médicos o de remolque.
Las primas mensuales pueden ir desde los USD 5 y aumentan entre mayor cobertura tenga la póliza. Para decidirse por un seguro, es necesario evaluar el uso que se da al vehículo. No es igual el riesgo de un auto que viaja constantemente en carretera, que uno que solo se usa en la ciudad en ciertos días.
¿Cuál es el proceso para aprovechar el seguro de vehículos?
Si el conductor tiene un seguro de vehículos, la empresa proveedora le explicará todos los beneficios y usos del mismo. A continuación, compartimos una guía general para acceder al seguro.
- En caso de requerir un auxilio mecánico o grúa, es necesario comunicarse al teléfono de asistencia para coordinar un servicio de emergencia.
- Notificar a la aseguradora lo sucedido, ya sea presencialmente o a través de correo electrónico.
- Presentar información de fecha de siniestro, número de póliza, datos del vehículo, formularios de la aseguradora (de ser el caso) y detalle de lo sucedido, según los plazos de la compañía.
- La aseguradora confirmará la recepción de la notificación y solicitará los documentos de respaldo acorde a lo ocurrido.
- El vehículo tendrá que ser revisado en un taller mecánico para que se evalúen los daños, preferiblemente si es en un taller autorizado, para que se levante una proforma.
- La aseguradora realiza una inspección, evalúa los valores de la proforma y determina si es necesario algún ajuste para autorizar la reparación o el cambio del vehículo.
- El cliente cancela el valor de deducible y la aseguradora procede con la liquidación. El deducible es un monto previamente fijado dentro de la póliza, que se paga en caso de sufrir un accidente o pérdida.
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