La producción de petróleo de Ecuador irá a la baja por el apagado de los pozos de crudo. La empresa pública Petroecuador informó este 24 de febrero de 2023 que se inició con el apagado progresivo en los campos operados por esta empresa en la Amazonía.
La medida se tomó debido a la suspensión del bombeo por el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) y el Oleoducto de Crudos Pesados OCP (operado por OCP Ecuador SA). Además, los combustibles que se transportan por el Poliducto Shushufindi-Quito.
La paralización de estas operaciones se produjo el 22 de febrero de 2023 luego de que el puente sobre el río Marker, en la provincia de el Napo, colapsará por el avance de la erosión regresiva del río Coca.
Petroecuador notificó a los consorcios que prestan sus servicios en los bloques petroleros para buscar opciones para minimizar el impacto en las locaciones. El fin es ejecutar un apagado planificado y controlado, informó María Elisa Soledispa, gerente general subrogante de la petrolera estatal.
Ella realizó este 24 de febrero un sobrevuelo por la zona del río Marker para constatar la situación de la zona y las labores de contingencia y drenaje en el SOTE. Estas tareas están a cargo de equipos técnicos de la petrolera pública y del Cuerpo de Ingenieros del Ejército.
La producción caerá de manera progresiva
El apagado de los pozos petroleros se realiza porque la capacidad de los tanques de almacenamiento de crudo, ubicados en Lago Agrio, llega a su límite. Al estar suspendidas las operaciones por los oleoductos no se puede transportar el crudo del Oriente hacia la terminal de Balao, en Esmeraldas.
Los tanques de Lago Agrio tienen capacidad para2 millones de barriles. Se cuenta con ocho tanques de 250 000 barriles cada uno, según información de Petroecuador.
Esta medida provocará que la producción diaria empiece a descender. Miguel Robalino, consultor petrolero, estima que la caída se evidencie a partir de este fin de semana, 25 de febrero de 2023.
Actualmente, la producción está en 482 733 barriles por día, según el reporte de operación del 23 de febrero de la Agencia de Regulación de Energía y Recursos Naturales no Renovables. Mientras tanto, el día previo fue de 482 678 barriles.
El 10 de diciembre de 2021, cuando se suspendieron también las operaciones en los oleoductos la producción de crudo –que tenía en promedio 485 00 barriles diarios- cayó hasta los 160 000 barriles por día.
Entonces, la suspensión de las operaciones duró en promedio 45 días mientras se construían nuevas variantes para remplazar las tuberías afectadas por la erosión regresiva del río Coca, en el sector de San Luis.
Los planes de Petroecuador
La gerente general subrogante de Petroecuador informó que se adoptarán las medidas necesarias para precautelar y garantizar la continuidad de las operaciones de la empresa.
Para lograr este objetivo, mientras tenga vigencia la medida de fuerza mayor, se optimizarán los sistemas de almacenamiento disponibles y la provisión de hidrocarburos de manera oportuna para atender la demanda interna. Este plan se aplicará hasta que se reanuden las operaciones en los oleoductos y el poliducto.
En diciembre 2021, las operaciones petroleras se retomaron 20 días después de que se produjo la afectación a los oleoductos, en el sector de Piedra Fina.
Sin embargo, las operaciones regulares en los campos se retomaron luego de 45 días. “Estabilizar la producción demoró cuatro meses, hasta abril de 2022”, expresó Robalino.
Entonces esta afectación le costó al Estado USD 578 millones. El monto incluye los recursos para importar derivados, construir las nuevas variantes y reincorporar los pozos a la producción. “Cada día de paro le cuesta al país entre 15 millones y 20 millones”, refirió Robalino.
Cuando un pozo se apaga se requiere de un proceso especial para encenderlo y ponerlo operativo. Los técnicos deben revisar que todas las partes de esta infraestructura se encuentren en condiciones óptimas para ponerlo a funcionar nuevamente.
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