Conseguir un jardín bello, frondoso y sano no tiene secretos. El abono y la tierra aportan en gran parte al cultivo, pero su estética y crecimiento dependen de la atención que reciba. Un cuidado importante es la poda.
Esta técnica de la jardinería y la agricultura consiste en suprimir las partes secas, dañadas, maltratadas e inútiles de una planta. Es la limpieza de la misma. Los expertos recomiendan realizarla con cada Luna llena o creciente. O antes de que empiece la época de florecimiento en los árboles frutales. De ese modo, se obtienen mejores productos, flores y hojas más grandes.Magdalena Pacheco, de 78 años, tiene su casa en el barrio San Antonio, en el sur de Ambato. Ella siembra buganvillas, rosas, limones, tomates, margaritas, cartuchos, gerberas (familia del girasol) y coloridos arbustos.
Muchas de sus plantas -dice- ya tienen 30 años. Ella invierte en un profesional para el cuidado. “No es fácil. Los árboles deben podarse en julio. Las flores y los arbustos, todos los meses”.
La poda en las flores y arbustos ornamentales se realiza con un fin estético. Así se les da forma y se fortalecen el crecimiento y grosor de las hojas y flores.
La poda, sin embargo, podría secar y matar a la planta si no se hace bien. Así lo explica Luis Llanzapanta, del Club de Jardinería de Ambato. Según él, la muerte sobreviene porque a través de las heridas (raspones o cortes rectos) ingresan las bacterias y parásitos.
Este método exige el uso de herramientas desinfectadas. La época y el tipo de planta también influyen en el resultado, señala el agrónomo José Parra.
La época influye en los cortes
Hay varios tipos de poda.
Esta depende de la edad de la planta y de la época.
Cuando está en crecimiento lo importante es impulsar el desarrollo de la planta. Esta poda se realiza con cortes moderados, 1 centímetro sobre la yema.
En el caso de los arbustos basta con retirar las hojas secas. Otra poda es la de mantenimiento. Se la practica cuando la planta ya está madura.
Es decir, cuando ha alcanzado el tamaño adecuado, pero está creciendo muy larga y con flores y hojas pequeñas. El principal objetivo de esta poda es retrasar el envejecimiento de la planta a través de los cortes de grandes tallos o ramas.
En las flores, la poda se realiza cada mes. En los arbustos únicamente cuando lo requieran, ya que siempre necesitan tener bastantes hojas. Es preferible que se practique con más constancia en invierno; y en los árboles, antes del florecimiento.
También existe la poda para las plantas envejecidas. Es decir, aquellas que están secas y con las hojas oscuras y sin brillo. Así se eliminan las partes viejas y menos productivas de la mata. Es decir, los tallos secos y que ya no florecen o dan nuevas ramas.
Para cada planta
A la planta de mora se le podan todas las ramas que producen el fruto. De esta forma se elimina la frondosidad y se impulsa el crecimiento de un fruto más grande.
Para el durazno, hasta los tres años se realiza una poda de formación por año. Se deben dejar únicamente tres brazos (ramas) principales de la planta para dar forma al árbol. Cuando es grande se retiran las ramas que ya produjeron y se despuntan para un mejor desarrollo.
Para los perales, el árbol se forma en sus primeros años con cuatro brazos. Todo lo que crece bajo estos se saca o poda.
Este árbol también produce frutos en la misma rama, de dos a cuatro años.
Para la poda de la planta de manzana igualmente se forma con cuatro brazos. Siempre se retiran las ramas entrelazadas y las que están muy cerca para facilitar el crecimiento de la planta y de la fruta.
La poda de la almendra tiene tres y cuatro brazos principales. La poda se practica, al igual que todos los frutos, antes de la floración. Luego de iniciada esta, lo único que se puede retirar es las ramas secas.
En la claudia, cuando está creciendo, se dejan cuatro brazos principales. Luego deben retirarse las ramas viejas y secas para que se desarrolle.
Las herramientas
Las tijeras con las puntas arqueadas son pequeñas y de fácil utilización para la jardinería o en el huerto. Sirven para cortar todo tipo de rama s, gruesas o delgadas, sin rasgar o dañar la planta.
La tijera larga o también denominado podón es muy similar a la anterior y también muy útil.
Se la emplea para los lugares menos accesibles y con las ramas que tienen mayor grosor.
El serrucho podón es muy práctico para las actividades de jardín. Tiene la cuchilla curva que ayuda a cortar ramas grandes. No se atasca y tampoco rompe la corteza de las plantas que se podarán.