Según cifras de la Superintendencia de Compañías, al primer trimestre de este año, los ecuatorianos que disponen de tarjetas de crédito de casas comerciales tenían un saldo por pagar de USD 192,2 millones.
En total, en el país se registraron casi tres millones de tarjetas de este tipo, correspondientes a 23 casas comerciales.
Ayer, la Junta bancaria resolvió eliminar las tarjetas de crédito de circulación restringida que eran utilizadas en tiendas de ropa y electrodomésticos, principalmente. De acuerdo con la resolución JB-2012-2225, aprobada el 5 de julio pasado, solamente las instituciones financieras y las compañías emisoras o administradoras de tarjetas de crédito podrán actuar como emisores.
“A partir de la vigencia de la presente reforma, no se podrá autorizar la emisión de tarjetas de crédito de circulación restringida”, determinó la resolución.
De esta manera, las tarjetas de crédito de circulación restringida (que solo se pueden usar para compras en dicho establecimiento) deberán salir del mercado.
Por lo tanto, clientes que compraban a crédito en, por ejemplo, almacenes de ropa o electrodomésticos, ya no podrán hacer uso de estos medios de pago.
Únicamente estarán en el mercado, mientras la Superintendencia de Compañías determina el cronograma de eliminación, las tarjetas de crédito de circulación restringida emitidas por compañías que son originadoras de procesos de titularización de cartera.