El Servicio de Rentas Internas (SRI) recaudó USD 12 millones más por impuesto temporal a la riqueza de personas naturales, en mayo de 2022. Quito sigue liderando el escalafón de esta contribución. En los primeros cinco meses del año, la Administración Tributaria recaudó USD 120 millones por este tributo temporal.
La contribución fue establecida en la reforma tributaria, denominada Ley para el desarrollo Económico y la Sostenibilidad Fiscal, vigente desde noviembre pasado.
Las personas naturales del cantón Quito aportan con el 50% de lo recaudado, es decir, USD 60 millones. Guayaquil ha entregado USD 15 millones, apenas el 12,5%.
Así, las personas naturales obligadas a pagar el impuesto al alto patrimonio se concentran, en mayor medida, en Quito con una diferencia de más de USD 45 millones con respecto a Guayaquil. A estas dos jurisdicciones le siguen Samborondón con USD 12,4 millones y Cuenca con 10 millones.
El número de contribuyentes varía en cada cantón
La Dirección Zonal del SRI de Guayas no concedió una entrevista para abordar el tema; sin embargo, recomendó que los montos pagados se analicen considerando la cantidad de contribuyentes dentro de cada cantón, a fin de asociar el monto total recaudado frente al número de contribuyentes.
En un desglose explica que Pichincha tiene518 386 personas naturales, de las cuales 2 490 declararon impuesto al patrimonio. En el caso de Guayas, la cantidad suma 429 768 personas; solo 904 declararon tener altos patrimonios.
Ese argumento no es sólido para Alcides Gómez, experto tributario, quien dice que Guayaquil debería liderar el pago del impuesto, porque esta ciudad mueve toda la vida comercial del país. Añade la actividad agrícola y camaronera.
El director de la Cámara de Comercio, Juan Carlos Díaz Granados, apunta a que la diferencia se debe a que los montos patrimoniales de las empresas de Quito son mayores a las de Guayaquil en un 53%, según la Superintendencia de Compañías.
En esto coincide Christian Baquerizo, experto en derecho tributario. Hay compañías que tienen actividad en Guayaquil, pero su domicilio tributario consta en Quito. Eso también influye, menciona.
El fantasma de la evasión
El SRI afirma que realiza controles para asegurar el correcto pago de los tributos, los cuales se ejecutan con bases de información que constan en los catastros de bienes, pero resalta que la veracidad de dichos datos “es responsabilidad del sujeto que la proporciona y de la entidad pública a cargo del control de los catastros”.
La exdirectora del SRI, María Sol Andrade, dice que en los impuestos se hallan casos con riesgo tributario. “Hay un equipo que se dedica a la investigación de estas tramas; en el caso del impuesto al patrimonio podrán definirse cuando los procesos de control avancen”.
Se refiere al control de omisidad, que busca a personas y empresas que debían declarar y no lo hicieron) y que empezó en abril, y el control de veracidad, que analiza si el monto declarado es real. Este último empezó en mayo, explica.
Pero Gómez, quien además fue presidente del Colegio de Contadores del Guayas, aclara que Guayaquil no es que paga menos impuestos, sino que “hay más evasión”, y responsabiliza a la autoridad de estar vigilante de que exista concordancia entre el reporte de gastos y lo declarado.
Una de las principales vías de la evasión es el maquillaje de ingresos. “Ventas sin factura, empresas creadas para simular gastos de otras compañías de los mismos propietarios y, por supuesto, la desproporción entre lo que ingresa a la banca y lo que se reporta al fisco”, menciona.
La declaración de este impuesto debía realizarse hasta el 31 de marzo pasado, pero los pagos podían diferirse por hasta seis meses. Es decir, hasta septiembre se reflejará la contribución de quienes prorrogaron el pago.
Contribución de empresas
Según la normativa, esta contribución temporal es obligatorio para personas naturales y empresas con altos patrimonios. Lo pagan las personas que poseen USD 1 millón de forma individual o USD 2 millones en sociedad conyugal.
Las empresas, por su parte, tributan las que tienen bienes de USD 5 millones en adelante. La contribución lo hacen por 1 o 2 años, respectivamente.
Con respecto a lo contribuido por las empresas, la Administración Tributaria informó que se recaudó USD 316 millones de enero a mayo de este año por ese concepto. Pichincha contribuyó con USD 155 millones, Guayas con USD 103, y Azuay con USD 15 millones.
Según analistas, no es coincidencia que Pichincha y Guayas, con sus respectivas capitales, consten entre los mayores contribuyentes de estos impuestos temporales.
Según el Banco Central del Ecuador, más de la mitad de la producción nacional se origina en estas dos provincias. De acuerdo con la entidad, en 2020, Guayas lideró el aporte al valor agregado bruto con USD 26,8 millones, seguida por Pichincha (25,7 millones).
Montos
Las personas que están obligadas a pagar este impuesto son las que al 1 de enero de 2021 poseían un patrimonio igual o mayor de USD 1 millón.
El SRI había estimado un total de 6 000 ciudadanos y 1 931 compañías en la lista de contribuyentes. Los primeros deben pagar entre el 1 y el 1,5 % y las segundas, el 0,8% sobre su valor patrimonial.
Frase
Marisol Andrade
Exdirectora SRI
“Uno de los factores que también incide en que se pague o no el Impuesto al Patrimonio es el avalúo de los bienes de los contribuyentes”.