La canciller alemana, Ángela Merkel, y el presidente francés, Nicolás Sarkozy, asumieron ayer las negociaciones con los bancos para que asuman un mayor castigo la deuda griega, en la cumbre europea que avanzaba lentamente en su busca de un acuerdo anticrisis.
Los 27 mandatarios de la Unión Europea (UE) aceptaron un acuerdo para recapitalizar a los bancos, aunque la cifra total está supeditada a la quita (pérdida) de la deuda griega que las entidades afectadas estén acepten.
La Autoridad Bancaria Europea (ABE) calcula que los bancos europeos necesitan 106 000 millones de euros para recapitalizarse, según un documento divulgado ayer en su página de Internet. Es la primera estimación, que pudiera ser revisada en noviembre.
Los países que más inyección de dinero necesitan son Grecia España e Italia.
El acuerdo prevé además que los fondos propios de los bancos sean de un 9% del total de sus activos para el “30 de junio del 2012”, frente al 5% actual. Para conseguirlo, “los bancos tendrán que recurrir a capital privado, incluidas las reestructuraciones y la conversión de deuda en capital”.
Hasta que se logre ese objetivo del 9%, “los bancos tendrán que estar sujetos a ciertas obligaciones sobre el reparto de dividendos y el pago de bonificaciones” .
Para agilizar las negociaciones, Francia y Alemania decidieron tomar el toro por las astas. Sarkozy y Merkel negociaban personalmente la tarde de ayer con los bancos acreedores de la deuda griega para convencerlos de consentir una pérdida “de poco más de 50%”, indicó una fuente gubernamental europea.
Los europeos quieren reducir la deuda soberana griega desde el 160% del PIB en la actualidad, al 120% para el 2020.
La Eurozona (los 17 países que han adoptado el euro como moneda) no descarta tampoco obligar a los bancos a reducir al menos la mitad de la deuda griega, que bordea los 350 000 millones de euros y que asfixia a su economía, según fuentes próximas a las negociaciones.
El ‘lobby’ bancario, dispuesto a asumir una pérdida del 40%, considera demasiado elevada la propuesta de los Estados.
Si bien los europeos manejan que los bancos necesitan una inyección de capital de 106 000 millones de euros, aún no han especificado cuáles serían las entidades beneficiarias ni cómo se haría la recapitalización.
Según expertos, los bancos europeos con deuda griega podrían necesitar entre 200 000 millones y 300 000 millones de euros.
El tercer pilar del acuerdo, junto con la reducción de la deuda griega y la recapitalización de los bancos, es convertir al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera en un cortafuegos para impedir la propagación de la crisis a países como Italia, tercera economía de la Eurozona. Se habla que el fondo llegaría a 1 billón de euros.