El gobernador del Banco Central japonés, Masaaki Shirakawa, estimó que la economía del país asiático se contraerá en el primer semestre del año por la caída de la producción derivada del terremoto y tsunami del 11 de marzo, indicó ayer el Wall Street Journal. “Nos esperamos que la producción y el PIB disminuyan en el primer y segundo trimestres”, declaró Shirakawa en una entrevista concedida al diario económico.
Según la autoridad monetaria, el “corazón del problema” es el punto muerto en el que se encuentra la producción tras las catástrofes que dejaron 26 455 muertos y desaparecidos.
El terremoto y el tsunami provocaron el accidente de la central nuclear de Fukushima, situada a 250 km al noroeste de Tokio, que ha ocasionado cortes de energía y perturbaciones en la cadena productiva, que pueden durar hasta agosto. Los comentarios del funcionario coinciden con los de los analistas que prevén que Japón caerá en una recesión temporal después de la destrucción de la infraestructura.