A diferencia del campo Shushufindi, que fuera descubierto por Texaco-Gulf, el área Libertador fue explorado en 1980 por la Corporación Estatal Petrolera Ecuatoriana (CEPE) y su administración fue 100% estatal desde sus inicios, con la perforación del pozo Secoya 01, con 3 000 barriles.
Ubicado por vía terrestre a 30 minutos de Lago Agrio, el área Libertador abarca nueve campos: Secoya, Shuara, Pichincha, Shushuqui, Atacapi, Frontera, Tapi, Tetete y Arazá en 157 km².
De los nueve, los cinco primeros están considerados maduros en la actualidad, al tener un corte de agua del 80%. Entrarán en un proceso de optimización implementado por el consorcio Tecpetrol, Sertecpet y Schlumberger, señala el intendente de Libertador, Mario Sevilla.
Pero Frontera, Tapi, Tetete y Arazá no entrarán en el contrato de optimización a firmarse hoy en el Palacio de Carondelet, al ser considerados campos nuevos.
Las técnicas de recuperación mejorada o secundaria, explica Walter Paredes, técnico de Libertador, no implican un aumento de reservas sino el mejoramiento del factor de recobro de crudo.
Es decir, que en los yacimientos antiguos donde no se registra presión para que salga el petróleo, se inyectará vapor de agua o CO2 para que el crudo fluya a la superficie, recurso que de otra manera quedaría entrampado.