La situación actual en los mercados agrícolas es “preocupante, pero ninguna amenaza hay hasta ahora para la seguridad alimentaria mundial”, afirmó el Grupo G20, tras una videoconferencia entre Francia, EE.UU., México y las organizaciones internacionales.
“Sin embargo, el nivel elevado de los precios coloca a los países importadores de cereales en situación delicada. El maíz y la soya están particularmente involucrados”, agregó el comunicado del Ministerio de Agricultura francés, que preside el Agriculture Market Information System (AMIS).
Por su lado, el director general de la FAO, José Graziano da Silva, considera que los precios agrícolas seguirán altos y experimentarán una gran volatilidad en los próximos 10 años y recomendó a los países hacer reservas nacionales de productos alimentarios de base.
La FAO destacó la necesidad de cambiar el uso y despilfarro del agua en la cadena alimenticia y detalló el efecto de las sequías en la producción mundial de cereales y el alza de los precios de los alimentos desde el 2007. Por ello, propuso un nuevo plan para la gestión del agua en la agricultura.