Redacción Guayaquil
La confrontación no fue la fórmula que uso ayer el Presidente Rafael Correa en la sesión solemne por la Fundación de la ciudad. Pero el alcalde Jaime Nebot pronunció un apasionado discurso durante su homenaje a Guayaquil.
Con una hora de diferencia Correa acudió a la explanada del Centro Cívico, en el sur de Guayaquil, mientras el Alcalde recibía a los invitados en el Palacio de Cristal al pie del río Guayas.
A las 16:00 el presidente Correa llegó con su comitiva de seguridad. Ahí lo esperaban otros funcionarios gubernamentales e invitados, entre ellos organizaciones barriales, discapacitados…
Durante el acto, donde hubo condecoraciones, el Primer Mandatario se dirigió a los presentes y destacó las obras y cambios que realiza su Gobierno, en lo que denominó “la revolución bolivariana-alfarista”.
También volvió a cuestionar la veracidad de la denuncia sobre un supuesto aporte económico a su campaña del 2006 de parte de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La versión fue difundida a través de un video donde aparece el líder guerrillero Jorge Briceño, alias ‘Mono Jojoy’.
“No nos van a detener, mucho menos a intimidar con la presentación de presuntas pruebas forjadas… y que evidentemente fue manipulado, editado por el Ministerio de Defensa de Colombia…”, dijo Correa en su discurso de cerca de 25 minutos.
Añadió que esa denuncia no tiene valor alguno. Por lo contrario, manifestó que demuestra la “desesperación por desviar las miradas sobre las verdaderas denuncias de genocidio practicado por los paramilitares…”
También insistió en la ilegalidad del golpe militar en Honduras y en la reagrupación de las “fuerzas retardatarias, de intereses económicos y los grupos oligárquicos”, que actúan dentro y fuera del país.
Treinta minutos después, a las 17:00, el alcalde Jaime Nebot llegó con su comitiva al Palacio de Cristal. Fue recibido por autoridades locales y representantes de los barrios populares como Guasmos, Trinitaria, Flor de Bastión. Las 2 500 sillas ni fueron suficientes para acomodar a los invitados, algunos permanecieron de pie.
Luego de entregar cinco preseas al mérito cultural, empezó su discurso agradeciendo a los concejales por su gestión. Continuó su alocución sobre los avances de la ciudad y seguidamente criticó la política de acecho que intenta “entorpecer el trabajo, que ha servido para mejorar la calidad de vida de todos”.
El Alcalde pidió “que se respete y se entienda a la ciudad” y señaló que no permitirá que el Gobierno “debilite su derecho a hacer el bien, con eficacia y corazón”.
El burgomaestre ratificó que la ciudad respeta a la Constitución, a pesar de haber dicho No en la pasada consulta popular. Pero que dijo Sí al “exitoso modelo de bienestar”, que le dio la reelección con 762000 votos.
“Guayaquil es libre y no admite cadenas, ni en el cuerpo, ni en el alma… pero no admitirá que nadie le imponga sistemas fracasados que solo generan pobreza e injusticias”, dijo.
Nebot citó a José Martí, intelectual y político cubano, que decía que la “revolución es igualdad de mérito, trato respetuoso y aplicación plena del Derecho”.
El Alcalde interactuó con el público y preguntó ¿será revolución quitar dinero y competencias a los municipios y consejos provinciales?. La audiencia contestó: No… Así hizo varias preguntas y pidió luchar por la libertad en todas sus formas.