Funcionarios de seguridad afganos inspeccionan la escena de un atentado suicida contra los participantes de una reunión entre militantes talibanes y el gobernador de la provincia de Nangarhar, frente a la oficina del gobernador en Jalalabad, Afganistán, el 17 de junio de 2018. Foto: EFE
Los talibanes rechazaron el domingo, 17 de junio del 2018, un llamado del presidente afgano, Ashraf Ghani, a prolongar un inédito alto el fuego con motivo del fin del Ramadán, frustrando las esperanzas de paz de una población agotada por décadas de conflicto.
“El alto el fuego termina esta noche y retomaremos nuestras operaciones si Dios quiere. No tenemos la menor intención de prolongar el alto el fuego”, declaró el portavoz talibán Zabihullah Mujahid en un mensaje.
El presidente Ashraf Ghani había anunciado el sábado que extendería el alto el fuego y pidió a los talibanes hacer lo mismo.
El portavoz talibán no hizo alusión directa al llamado del presidente Ghani, que había recibido el apoyo de la comunidad internacional.
La misión de la OTAN en Afganistán y las fuerzas estadounidenses indicaron que respetarían el anuncio de la ampliación del alto el fuego hecho por Ghani. La Unión Europea (UE) lo calificó por su parte de tregua “histórica”.
El presidente afgano también indicó que 46 prisioneros talibanes habían sido liberados, una tendencia que iba “a proseguir”, según anunció.
Esperanza de paz
Se trataba del primer alto el fuego formal a escala nacional desde la invasión estadounidense en 2001, y la alegría que suscitó despertó la esperanza de que la paz se instalara en el país.
Los últimos días dieron lugar a momentos inéditos de fraternización entre los combatientes talibanes, los civiles y los miembros de las fuerzas de seguridad.
Pero el ambiente se vio empañado este domingo por un atentado suicida reivindicado por el grupo Estado Islámico (EI) , que dejó al menos 18 muertos y unos 50 heridos en la provincia oriental de Nangarhar.
Según el portavoz del gobernador provincial, Attaulá Khogyani, un kamikaze, a pie, se hizo estallar en el momento en que una muchedumbre abandonaba la oficina del gobernador, tras una celebración por el fin del mes del Ramadán.
El sábado un primer atentado, también reivindicado por el EI, había causado al menos 35 muertos entre una multitud que celebraba el cese de los combates en la misma provincia.
Sin sorpresas
El anuncio del rechazo talibán para prolongar la tregua no ha sorprendido a ciertos diplomáticos occidentales destinados en Kabul.
“Si prolongan el alto el fuego, se verán obligados a negociar, algo que creo no están interesados en hacer. Lo que ellos quieren es una verdadera victoria”, declara uno de ellos, que requiere el anonimato.
Ghani, anunció la semana pasada un alto el fuego unilateral para la fiesta del Eid al Fitr e indicó que tanto la policía como el ejército cesarían sus operaciones contra los talibanes durante ocho días.
Los talibanes anunciaron por su parte su primer alto el fuego por tres días con las fuerzas afganas con motivo de la misma fiesta. Se trata del primer alto el fuego declarado por este grupo en 17 años de conflicto, y que ahora rechazaron prolongar.