La inteligencia artificial representada por herramientas como Chat GPT, revoluciona la forma en la que las personas acceden a la información. Sin embargo, en países como China, Irán, Corea del Norte y Rusia, el uso de esta tecnología enfrenta estrictas restricciones o bloqueos totales, según la BBC.
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Las razones varían entre control político, censura informativa y preocupaciones de seguridad nacional.
China
En China, el bloqueo a ChatGPT responde a la política gubernamental de controlar el flujo de información en línea. El Partido Comunista Chino mantiene una política conocida como el Gran Cortafuegos, que restringe el acceso a plataformas extranjeras que no puedan ser controladas o censuradas localmente.
El temor a que los ciudadanos accedan a información no autorizada o a narrativas contrarias a las oficiales motiva esta decisión. Además, China promueve el desarrollo de sistemas de inteligencia artificial propios, bajo vigilancia estatal.
Irán
En Irán, el bloqueo obedece principalmente a razones de censura política y religiosa. El gobierno iraní restringe el acceso a plataformas digitales que permitan la difusión de opiniones contrarias al régimen o que desafíen las normas sociales establecidas. ChatGPT, por su capacidad de generar respuestas amplias y no censuradas, es percibido como una amenaza al control del discurso público.
Corea del Norte
En el caso de Corea del Norte, el acceso a internet está restringido para la población en general. Solamente algunos miembros de la élite política y científica tienen acceso a una red controlada por el Estado. El bloqueo a ChatGPT no es un caso aislado, sino parte de una política más amplia de aislamiento informativo para evitar cualquier influencia extranjera sobre la ciudadanía.
Rusia
Rusia, por su parte, endureció su control sobre las plataformas extranjeras tras el inicio de la guerra en Ucrania. El Kremlin bloqueó o limitó múltiples servicios digitales occidentales para controlar la narrativa interna sobre el conflicto. ChatGPT no está oficialmente bloqueado por el gobierno ruso como sucede en China o Corea del Norte. Sin embargo, el acceso puede estar limitado de forma indirecta, ya sea por decisiones de las autoridades o restricciones impuestas por OpenAI.