La oposición ha pedido que el Vaticano medie en el diálogo que se iniciará el próximo martes en Venezuela con Nicolás Maduro. Foto: EFE
La oposición venezolana pidió al Vaticano sumarse a una mediación internacional para un diálogo con el gobierno, pero insistió en que el referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro no es negociable.
“Es necesario ampliar la mediación. Consideramos fundamental la participación de un representante de la Santa Sede y la incorporación de más expresidentes”, señaló este jueves 7 de julio del 2016 en un comunicado la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
La alianza opositora se declaró dispuesta a asistir a una primera reunión el próximo martes si se cumple esa solicitud y si además se garantiza la celebración del revocatorio contra Maduro.
Sin embargo, descartó que el encuentro se lleve a cabo en República Dominicana, como planteó el mandatario el miércoles en una nueva exhortación a conversar “sin condiciones”.
La comisión que promueve actualmente el diálogo a instancias de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) la integran el exjefe del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y los expresidentes Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá).
Este jueves, el presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Diego Padrón, afirmó que el gobierno de Maduro “carece de autoridad moral para llamar al diálogo y a la paz”.
Al inaugurar la cita anual de los obispos, Padrón justificó su acusación en que el gobierno no ha podido derrotar lo que denuncia como una “guerra económica” y “dar alimentos y medicinas al pueblo”.
Sin embargo, ofreció los “buenos oficios” de la Iglesia para propiciar un diálogo.
En medio del choque de poderes con la oposición que controla el Parlamento y la tensión social por la severa crisis económica, Maduro reestructuró parcialmente este jueves el alto mando de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), un poderoso actor político y económico.
Dos días después de afirmar que “el poder militar tiene que seguir incrementándose”, el presidente ratificó al ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, y cambió al comandante de la militarizada Guardia Nacional, Néstor Reverol.