Un grupo de 19 niños de nueve países iberoamericanos visita esta semana lugares del Caribe colombiano que fueron determinantes en la obra de Gabriel García Márquez, Premio Nobel de Literatura de 1982.
Más noticias:
El viaje es parte del concurso ‘Macondo sí tiene quien le escriba’, organizado por la Fundación Gabo y el banco de desarrollo de América Latina – CAF, en el año en que se conmemora el décimo aniversario del fallecimiento del escritor.
Luego de la premiación en Cartagena, el pasado martes, los ganadores, provenientes de Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, España, México, República Dominicana y Venezuela, hicieron el recorrido. Ellos, quienes compitieron con otros 2 005 niños, conocieron la magia de Macondo en otras ciudades como Aracataca, en el departamento de Magdalena, y Santa Marta, la capital regional.
El concurso de relatos, en el que participaron niños de entre 10 y 13 años, tuvo como temática “Nuestros héroes y heroínas”.
“La Fundación Gabo, acostumbrada a trabajar con periodistas adultos y a premiar el mejor periodismo en Iberoamérica, se enorgullece en presentar este primer premio dirigido a niños y niñas. Es considerada la nueva generación de contadores de historias que liderará el futuro, como lo hizo en su momento nuestro fundador Gabriel García Márquez”, dijo Jaime Abello Banfi. director general de la Fundación Gabo,
Una de las ganadoras fue Frida Hernández, mexicana de 11 años, que presentó el relato titulado “Mexicana en las estrellas”, inspirado en la ingeniera y divulgadora científica Katya Echazarreta, la primera mujer de ese país en viajar al espacio.
“Lo único que extraño de la comida de mi casa es el picante, pero acá es tan sabrosa como en México y la gente es muy amable”, comenta Frida en Barranquilla, antes de abordar el autobús a Aracataca, pueblo natal del nobel.
Jóvenes escritores
Los menores van acompañados por tutores en el recorrido por lugares significativos para Gabriel García Márquez. Ellos hablaron de los temas que los motivaron a escribir, que van desde próceres de la independencia de sus países hasta personajes de la actualidad.
“Mi relato se llama ‘El negro sambo con olor a chocolate’, que hace referencia a los esclavos en las plantaciones de cacao. Ellos debían llevar pesadas cargas durante largos recorridos y a quienes se les impregnaba ese olor”, explica Jonathan Veloz, de 12 años. Él vive en el estado de Carabobo, en Venezuela, y ambientó su relato en la época de independencia de su país.