Desde el aeropuerto Hartsfield-Jackson despega el vuelo con el presidente Barack Obama . Foto: Brendan Smialowski / AFP
En momentos en que el gobierno de Estados Unidos incrementa la seguridad en sus aeropuertos, la cadena NBC informó este martes, 10 de marzo de 2015, que cientos de tarjetas de identificación de trabajadores se perdieron o fueron robadas en el aeropuerto de Atlanta, aunque la terminal aérea restó importancia al hecho.
Entre 2012 y 2014 desaparecieron unas 1 400 credenciales que permiten acceder a zonas restringidas del aeropuerto internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta, uno de los más activos en Estados Unidos, que emplea a unos 60 000 trabajadores y moviliza a la mayor cantidad de pasajeros anualmente en el país, según NBC News.
Expertos consultados por el medio afirmaron que la situación era bastante grave y podía representar una amenaza para la seguridad del aeropuerto, que tiene vuelos a 75 destinos internacionales en 50 países y 150 nacionales.
Pero el aeropuerto minimizó el riesgo al afirmar que las tarjetas de identificación por sí solas no permiten la entrada a zonas restringidas, lo que requiere además una clave personalizada.
“Nos tomamos muy en serio la pérdida o robo de identificaciones de empleados. En ningún momento nadie con una credencial robada o perdida ha intentado entrar a las zonas restringidas del aeropuerto”, dijo a la AFP en un correo electrónico el portavoz del aeropuerto Reese McCranie.
“Debido a las medidas de seguridad, no creemos que las tarjetas perdidas o robadas sean un riesgo significativo para la seguridad del aeropuerto“, señaló. “Las credenciales son desactivadas al momento de ser reportadas como robadas o extraviadas”, agregó.
El aeropuerto de Atlanta fue el único que le suministró cifras de credenciales desaparecidas a NBC News, que realizaba una investigación al respecto a nivel nacional.
La agencia estadounidense de seguridad aérea TSA dijo de su lado en un comunicado que “recientemente ha tomado medidas para mejorar la seguridad de los principales aeropuertos de Estados Unidos”, como una supervisión más estricta de empleados, reforzamiento de seguridad en puntos de acceso y más patrullas de agentes de TSA.
El Departamento de Seguridad Interna (DHS) ordenó también una investigación para identificar cualquier vulnerabilidad en los aeropuertos, agregó TSA.