Estados Unidos movilizó este sábado 21 de junio varios aviones bombarderos B-2 de su fuerza aérea, según recoge The New York Times. Las comunicaciones de control de tráfico aéreo indican que las aeronaves despegaron de Misuri en dirección al Pacífico.
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Según el medio estadounidense, los aviones están equipados para transportar bombas antibúnkeres de 13 600 kilos. En tanto, el presidente estadounidense, Donald Trump, continúa deliberando sobre si atacará Irán. El jueves, el republicano anunció que tomaría la decisión “en las próximas dos semanas”.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, advirtió de que una intervención de EE.UU. en el conflicto entre su país e Israel sería “muy, muy peligrosa” para todos.
Sobre el terreno, siguen los intercambios de ataques. Irán lanzó oleada de misiles contra Tel Aviv y el ejército israelí respondió con bombardeos contra instalaciones nucleares iraníes.
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Israel presiona a EE.UU. para atacar Irán
Funcionarios israelíes advirtieron al gobierno de Donald Trump que no esperarán dos semanas para desmantelar las partes clave del programa militar iraní. Según publicó el diario El País de España, Israel planea actuar por su cuenta si EE.UU. retrasa una decisión.
Durante una tensa llamada telefónica, representantes del gobierno israelí transmitieron su malestar a funcionarios estadounidenses. Ese mismo día, Trump declaró que decidiría en las próximas dos semanas si atacará o no a Irán, argumentando que aún existe margen para las negociaciones.
En la conversación participaron el primer ministro Benjamin Netanyahu, el ministro de Defensa Israel Katz y el jefe del Estado Mayor Eyal Zamir. Israel cree que dispone de una ventana de oportunidad limitada para atacar Fordow. Es una instalación subterránea considerada la joya del programa nuclear iraní.
Aunque Israel evalúa una acción unilateral, reconoce que solo EE.UU. cuenta con bombas antibúnker capaces de penetrar Fordow, excavada en una ladera montañosa. Este sábado, Washington movilizó varios bombarderos B-2 hacia el Pacífico, aviones equipados para transportar municiones antibúnker de más de 13 toneladas, lo que incrementó las especulaciones sobre un posible ataque coordinado o independiente, según las fuentes que recoge El País.
