El monitoreo y control de la pesca de tiburones en aguas ecuatorianas ha mejorado desde que se expidió el Decreto Ejecutivo No. 486 en 2007, que permitió la comercialización de todas las partes del pez, pero bajo el amparo de la “pesca incidental” y se prohibió el aleteo.
Esto lo asegura Segundo Coello, experto en administración de Recursos Naturales y Pesqueros, quien presentó el informe que sirvió para crear el Plan de Acción Nacional para la Conservación y el Manejo de Tiburones de Ecuador del 2008.
Este plan se hizo luego de que el presidente Rafael Correa expidiera el Decreto Ejecutivo 902, donde se estableció una política de Estado para la conservación y manejo del recurso tiburón en los mares ecuatorianos.
Con esta base, la Subsecretaría de Recursos Pesqueros aplicó el plan que cuenta con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Este programa fue evaluado hace dos años y, según Coello, ha sido exitoso, pues se registra un cumplimiento de entre el 85% y 90%. Esto porque la Subsecretaría de Pesca ha invertido un promedio de USD 500 000 dólares anuales para su ejecución.
“Hay monitoreo y control en el 90% de los puertos ”.
Según investigaciones de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) hasta el 2008 se comercializaban entre 1,3 y 2,7 millones de aletas de tiburón a escala mundial. Una parte importante provenía de Ecuador.
Los tiburones son capturados principalmente junto a especies de peces grandes como dorados, picudos, atunes y peces espada.
En Ecuador se han registrado 38 tipos de escualos, pero las especies que más se exportan son el tiburón zorro o rabón y el tinto.
La conservación de los tiburones es importante porque estos animales ayudan a controlar el equilibrio del ecosistema marino, impidiendo la sobrepoblación de otras especies.
A pesar de su importancia, la quinta parte de especies de tiburones evaluadas por la UICN en su Lista Roja, se encuentra amenazada a nivel global por la pesca indiscriminada.
El tiburón oceánico, el tiburón blanco, el tollo común, el tollo manchado, el tiburón martillo y el tiburón ballena son algunos de los tiburones oceánicos amenazados que están en el Pacífico.
Según un informe de la organización mundial Traffic, los mayores desembarques de aletas de tiburón que se hicieron hasta el 2006 en Ecuador se concretaban a través de los puertos de Manta, San Mateo y Santa Rosa.
Entre 1994 y 2004 el destino del 66% de las aletas fue a Hong Kong, Japón (16%), China (10%), y el 8% restante a otros países, según el estudio de Traffic.