En Estambul, Turquía, decenas de civiles salieron a las calles para rechazar el intento de golpe de Estado anunciado por el ejército de ese país. Foto: EFE
Alemania amenazó este lunes 18 de julio del 2016 con romper las negociaciones de adhesión de Turquía a la Unión Europea si el gobierno restablece la pena de muerte, como insinuó el presidente Recep Tayyip Erdogan tras el intento fallido de golpe de Estado.
“Alemania y la UE tienen una posición clara: rechazamos la pena de muerte categóricamente”, declaró Steffen Seibert, el portavoz del gobierno alemán, que denunció además “escenas indignantes” en las primeras horas tras el golpe.
“La introducción de la pena de muerte en Turquía significaría el fin de las negociaciones de adhesión a la Unión Europea”, agregó.
“En las primeras horas consecutivas al fracaso del golpe de estado vimos escenas indignantes de arbitrariedad y de venganza hacia los soldados en la calle”, dijo Steffen Seibert, portavoz del gobierno. “Eso es inaceptable”, agregó.
“La UE es una comunidad de valores y una comunidad unida en torno a la idea de que la pena de muerte se sitúa fuera de sus valores”, dijo Seibert.
“Algunas declaraciones provenientes de Turquía son inquietantes”, agregó el portavoz.
El gobierno alemán condenó el intento de golpe en Turquía pero debe prevalecer “el estado de derecho”.
“En ese contexto hay que decir claramente que la destitución de
2 500 jueces al día siguiente de la tentativa de golpe plantea serias preguntas y dudas”, insistió Seibert.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, declaró el lunes que un eventual restablecimiento de la pena de muerte debe ser discutido por el parlamento y necesita un cambio de la Constitución.
Yildirim dijo además que Turquía hará rendir cuentas a los golpistas “en el marco de la ley”.
“Haremos rendir cuentas por cada gota de sangre derramada” pero “en el marco de la ley”, aseguró Yildirim, que tras el golpe permanecen detenidas 7 543 personas, entre ellas 6 038 militares, 755 magistrados y 100 policías.