Fabián Zúñiga (primero desde la derecha) es el presidente de Ecuatoriano Unido. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
Gary es el mayor de los siete hermanos Moreno Garcés. A sus 66 años, busca incursionar en la escena política a través de su movimiento Libertad es Pueblo. En su domicilio, ubicado al norte de Quito, el director nacional de esa organización tiene más de 12 fotografías de sus allegados. En las imágenes consta la del presidente de la República, Lenín Moreno. “Una vez me pidió que no diga que soy su gran hermano”, bromeó Gary, quien es ingeniero químico de profesión.
Libertad es Pueblo respalda “incondicionalmente” la gestión del Primer Mandatario. De hecho, Gary Moreno reveló que el movimiento empezó a formarse a raíz de la campaña presidencial de Lenín. “Entre todos los hermanos nos organizamos para apoyarlo en diferentes provincias del país”.
El 25 de septiembre pasado el Consejo Nacional Electoral (CNE) otorgó la personería jurídica a Libertad es Pueblo, con ámbito de acción nacional.
En estos días, la organización analiza los posibles precandidatos que presentarán para las elecciones seccionales del 24 de marzo del 2019.
Gary Moreno es tajante al decir que su respaldo está dirigido a la gestión de su hermano, pero no a Alianza País (AP). “Hemos pensado oxigenar el espacio político y creemos que lo mejor sería aliarnos a movimientos nuevos, jóvenes o independientes”, sostiene el titular de Libertad es Pueblo.
Otro movimiento que apoya abiertamente al presidente de la República es Ecuatoriano Unido. A esa tienda política pertenece Edwin Moreno, otro de los hermanos de Lenín.
Fabián Zúñiga, presidente de la organización, aseguró que Edwin Moreno es “otro militante más” que ha trabajado en beneficio del movimiento. Sin embargo, en el perfil de Twitter de Ecuatoriano Unido varios adherentes califican a Edwin como su “líder”.
Ecuatoriano Unido también tuvo su génesis en la campaña presidencial de Lenín Moreno.
Zúñiga apuntó que el movimiento tiene un corte humanista y progresista. En su caso, tiene una mayor cercanía con AP. “Apoyamos al presidente Lenín Moreno y a su programa de Gobierno. Estamos abiertos al diálogo y no excluimos a nadie”, sostuvo Zúñiga.
Los dirigentes analizan la posibilidad de establecer alianzas con movimientos afines a su postura política. Hasta el momento han sellado un acuerdo en Morona Santiago, denominado Progresa.
En la alianza participan Ecuatoriano Unido, AP y Vencemos. La coalición presentará candidatos a la Alcaldía y Prefectura en esa provincia.
Alianza País, en cambio, todavía delinea la conformación de lo que denominan un “gran frente progresista”.
En un evento oficial en Durán, la vicepresidenta de la República, María Alejandra Vicuña, contó que continúan “midiendo y evaluando” los cuadros y alianzas con otras organizaciones políticas.
Por el momento, la alianza que está próxima a sellarse es con Centro Democrático. Ayer, Jimmy Jairala, titular de esa organización, anunció que el acuerdo con Alianza País para la Alcaldía de Guayaquil está prácticamente cerrado.
El precandidato manifestó que este viernes se anunciará oficialmente el acuerdo.
En la última semana, País perdió aliados en Manabí, considerada como uno de los fortines del movimiento.
Unidad Primero, del prefecto Mariano Zambrano, y Camino, del alcalde portovejense Agustín Casanova, se alejaron de AP y se aliaron con el Partido Social Cristiano.
José Herrera, director de AP en Manabí y secretario de la Reconstrucción, no cree que el oficialismo haya recibido un golpe político de sus exaliados.
Este Diario intentó obtener una entrevista con el secretario Ejecutivo de AP, Gustavo Baroja, pero la cita se postergó en tres ocasiones.
Marcel Merizalde, analista y catedrático de la Universidad Central, considera que AP intenta construir un bloque afín con alcaldías, prefecturas y juntas parroquiales, para formar un frente que abone en la gobernabilidad del país. Además, reconoce que el oficialismo ha tenido “fracturas”.
Sobre los movimientos políticos de los hermanos del presidente, Merizalde cree que jugarán como ‘outsiders’ para evitar que otras fuerzas políticas le resten votos a AP.