La libertad es hacer lo que le hace bien a cada persona. Por eso me siento libre, porque tengo la oportunidad de ser entrenador de la disciplina deportiva que más me gusta, que es el triatlón. Por esa razón también tengo tiempo para entrenar y competir. Cuando necesito salir a prepararme o competir en otra ciudad o fuera del país, tengo toda la confianza para decirles a mis alumnos que necesito ausentarme por un tiempo. Eso, para mí, es ser netamente libre.
Mi trabajo es prácticamente un pasatiempo y disfruto mucho al hacerlo. Además, preparar a otras personas para el triatlón me llena de satisfacción.
Cuando compito, la sensación más hermosa que existe es sentir la energía de la gente y la adrenalina que recorre por todo mi cuerpo. En las competencias, un deportista llega a sentirse libre y disfruta con cada actividad que realiza.
Cuando un atleta se ha preparado bien, es como acercarse a rendir un examen en la escuela. Cuando se ha estudiado en la evaluación te va bien. Lo mismo ocurre en el deporte.