USD 550 millones se prevé de multilaterales hasta mayo

Entrevista al ministro Mauricio Pozo. Foto: Cortesía

¿Cómo inició el año desde el punto de vista fiscal?
Estamos aún cerrando los números de diciembre del 2020. Esto ocurre porque se hizo un esfuerzo enorme para cambiar el programa que manejaba toda la operación presupuestaria llamado eSIGEF, que estuvo vigente por muchos años. Ahora estamos usando el Sinafip. Por eso no puedo sacar cifras definitivas. Pero puedo mencionar que en el tema fiscal hay que ver tendencias. En el tema tributario, por ejemplo, el presupuesto del 2021 contempla una cifra más alta que la del 2020, pero no tanto como la del 2019.
El año pasado tuvimos una recaudación de USD 12 500 millones y este año es de 13 100 millones. Pero aún no está en el nivel que quisiéramos, es decir, en USD 15 000 millones. Alcanzar esa cifra va a depender de la actividad económica. Sin embargo, la recaudación de impuestos va mejorando mes a mes.
¿Es una recuperación lenta de la recaudación?
Yo diría, más bien, que es una recuperación esperada e, incluso, más rápida de lo que se podía haber esperado. Entre otras razones, porque la caída de la actividad económica en el 2020 va a ser menor que la esperada, en diciembre se recaudó más que en diciembre del 2019, lo cual es una buena señal, el empleo ha mejorado, hay superávit comercial y la liquidez crece a dos dígitos. Es decir, hay señales de que vamos por la ruta de la recuperación.
¿Cuál es el financiamiento esperado hasta mayo, cuando se termina el Gobierno de Lenín Moreno?
Estamos trabajando para el año completo. El financiamiento del 2021 se acerca a los USD 8 000 millones. El monto incluye lo que se necesita para cubrir el déficit (que se prevé en 3 900 millones, mucho menor que el 2020) y los otros compromisos que hay que cumplir como vencimientos de obligaciones, atrasos.
¿Cómo se cubrirá?
Solo del Fondo Monetario Internacional (FMI) se prevén
USD 1 500 millones este año. Y se espera plata de otros organismos multilaterales como la CAF, el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo. Ellos van a ayudar a cubrir más del 50% de lo que se necesita en este año.
¿Cuánto dinero llegará hasta mayo?
Solo de multilaterales pueden estar llegando USD 550 millones. Hay otras opciones que estamos trabajando, pero estas dependen de la velocidad con la que se entreguen.
¿De qué dependen los recursos de multilaterales?
Del cumplimiento del programa con el FMI. Hay que ver qué pasa con la reforma para la defensa de la dolarización. Si por alguna razón no se da habrá que ver qué se hace, pues si bien la gestión para que se apruebe está en manos del Gobierno, la decisión final es de la Asamblea.
¿Qué pasó con la operación con China?
La operación preveía una cifra de USD 2 400 millones. De esos, 1 000 millones eran necesarios para cerrar el financiamiento del año pasado y el resto, para 2021. Pero el 2020 tuvimos un sobrecumplimiento, pues el déficit inicial era de 8 700 millones, pero cerró en 7 700 millones e incluso puede que sea menor. Por eso no necesitamos esos recursos.
¿Está suspendido lo de China, considerando que en el 2022 faltarían 7,5 millones de barriles para cubrir exportaciones y ventas spot u ocasionales?
La premura bajó un poco, pero eso no quiere decir que no se vaya a necesitar. Hay que ver la disponibilidad de petróleo y, atado a eso, ver
el financiamiento.
¿Queda para el siguiente Gobierno?
No, necesariamente; hay que ver cómo van las cosas y las variables, incluso aquellas que no dependen de nosotros, como el precio del crudo, la evolución de la recaudación.
¿Cómo quedará la parte fiscal hasta mayo?
Vamos a dejar cumplidas las metas del programa en curso, eso quiere decir, las metas de reservas previstas hasta esa fecha, de ingresos y gastos. Además, dejamos un país financiado. Con una meta de déficit fiscal reducida y con un presupuesto más chico. Estamos caminando para entregar un país en orden, que requerirá consistencia. No la mesa servida, pero sí manejable.
¿Cuánto más pequeño será el presupuesto?
El valor va a estar en unos USD 28 000 o 29 000 millones, dependiendo de un ajuste que estamos haciendo estos días de acuerdo con el programa y algunos gastos que estamos por confirmar. El ajuste al gasto será probablemente mayor a los USD 3 000 millones.
¿Cuándo se reenviará el proyecto de defensa de la dolarización?
Los cambios que hay que hacer son solo de forma, pero aún no hay fecha para volver a enviar, porque estamos tratando de evitar que se le utilice como instrumento político para la actual elección.
¿Cree que haya los votos para la aprobación?
No me quiero anticipar, pues el proyecto aún no ha sido reenviado. Pero lo que sí puedo decir es que un asambleísta no puede estar a favor de la dolarización y votar en contra del proyecto. Es una total contradicción. Si la gente no quiere la reforma, mi criterio es que está en contra de la dolarización. Así de simple.
¿Cómo protege la dolarización la Ley?
Hay varios puntos, pero uno de los elementos principales es que las obligaciones que tiene el Banco Central del Ecuador (BCE) con terceros (dinero de los depositantes de la banca privada, de las cooperativas, de municipios, prefecturas) esté respaldado en recursos líquidos en las reservas internacionales.
Se ha dicho que el Central tiene recursos ociosos en Suiza ganando 0% de interés, en vez de estar en el país. ¿Es así?
No hay tal excedente, sino un hueco o faltante de USD 5 500 millones en reservas líquidas para que el BCE cubra sus obligaciones. Hasta que no se cubra ese hueco, no se puede tomar la plata del Central. Por eso, tomarse, como se ha dicho, USD 1 000 millones de las reservas para dar bonos no es posible, pues no hay excedentes, falta plata, hay un descalce. Y la plata que está ahí no es del Gobierno, sino de los clientes de los bancos, de los gobiernos locales, del IESS. Es plata de la gente.
Formación. Economista, por la Pontificia Universidad Católica del Ecuador y Máster por la Universidad de Notre Dame.
Experiencia. Fue Ministro de Economía entre 2003 y junio del 2004. Antes se desempeñó como analista económico, director y subgerente de la División de Operaciones y División Técnica del Banco Central.