Redacción Tecnología
Las posibilidades
Cada receptor para capturar la señal digital incluye funciones adicionales, como la posibilidad de congelar la imagen de un programa.
De la misma forma que el servicio satelital, la TV digital posibilitará la interactividad del usuario mediante la conexión telefónica o de cable, aunque se espera que este aspecto se potencie más.
En Estados Unidos las estaciones de TV dejaron, el viernes, de trasmitir señales analógicas para adoptar el formato digital.
Si bien los sistemas pagados, como el satelital o el cable, ya ofrecen esta tecnología desde hace más de dos años, el propósito es que los canales tradicionales lleguen a los hogares con mejores imágenes y sonido.
Para Carlos Klachquin, especialista en televisión digital, esta nueva plataforma de transmisión de imágenes conlleva varios beneficios para el usuario.
El primero es la digitalización, que permite usar de forma más eficiente el espectro radioeléctrico, porque incrementa el número de canales disponibles, que pueden pasar de los seis u ocho habituales a más de 25.
“La transmisión digital mejora, además, de forma significativa los formatos y la calidad de la imagen, que puede ser panorámica, y el sonido multicanal y bilingüe”. Pero hay otro ingrediente que hace aún más atractiva a esta tecnología, en relación con la análoga: posibilita la recepción móvil, es decir, que la señal puede ser recibida por la televisión con una simple antena telescópica, similar a la de una radio. Eso facilita que pueda ser captada en cualquier lugar, no solo de manera estática sino también en movimiento, por ejemplo en un bus, un tren o incluso en autos particulares.
También podrá verse en computadoras de mano, teléfonos celulares o videoconsolas portátiles”. Los estadounidenses accederán realmente a la TV digital con una cajita (el decodificador) que les permitirá seguir usando el aparato que ya tienen.
En ese país se empleará la norma ATSC, que posibilita la transmisión terrestre a largas distancias. Este estándar prioriza la transmisión de imágenes en alta definición.
De este modo, atraer al televidente y, por ende, retener al anunciante, manteniendo el precepto de TV gratuita autofinanciada por publicidad.
El formato ATSC también está relacionada con la inclusión social, porque garantiza la máxima cobertura tal como se ofrece con la TV analógica.
Uno de los países que también adoptó este formato de transmisión es México, que impulsa la adopción de este estándar en toda la región.
El argumento es que una norma común en todo el hemisferio se traduciría en más equipos, más proveedores y a precios más bajos. En Ecuador, la Superintendencia de Telecomunicaciones realiza pruebas técnicas para determinar qué formato adoptar. Realizó ensayos con el formato europeo, japonés y brasileño. Esta semana hará lo mismo con el chino y espera evaluar también el estadounidense.
Solo después tomarán una decisión sobre el estándar que regirá la TV digital en el país. Aún no hay una fecha límite.
Punto de vista
Tania Peréz/ Ingeniera
Cada formato tiene ventajas
El estándar ATSC que adoptó Estados Unidos hace énfasis en la alta definición de las imágenes, que resulta atractiva para los espectadores. Sin embargo, no incluye el tema de la movilidad que sí es priorizado por los japoneses y el europeo.
Esta plataforma tampoco incorporó los multiservicios, es decir, todo lo que implica interactividad, juegos y otros.
Lo que aún preocupa en Estados Unidos es que no todos los ciudadanos compraron el decodificador para capturar la señal digital, pese a que el Gobierno subvencionó estos equipos. El servicio de TV es tan importante que si EE.UU. no estaba listo, podía tumbar al Gobierno. Por eso, Obama extendió el plazo para su adopción. Debía ser en febrero.