Redacción Esmeraldas
‘Aquí, cualquier día viene un grupo y te dice que tienes que pagar para recibir protección”. Así comenta uno de los comerciantes de San Lorenzo, provincia de Esmeraldas, afectado por la delincuencia.
Prefiere el anonimato, mientras habla despacio desde su local, ubicado en la avenida Imbabura. Una larga y colorida fila de tiendas de ropa, electrodomésticos, víveres, restaurantes… se destaca en La Bahía, el sector más comercial de la ciudad, habitada por unas 40 000 personas.
En La Bahía, precisamente, fueron apresados, la semana pasada, seis presuntos delincuentes que habrían intentado extorsionar a los propietarios de los almacenes.
Wilmer C., José N. y William P. fueron capturados por la Policía, mientras que Darwin C., Francisco E. y Javier R. fueron detenidos por la Armada, tras una denuncia telefónica. Este tipo de acontecimientos no son aislados en el cantón fronterizo con Colombia.
Por esta razón, los comerciantes convocaron a una marcha contra la delincuencia, dicen estar cansados de los abusos. Aunque hoy todos hablan de la extorsión, en la Policía Judicial solo se presentó una denuncia en enero.
“No hay un vocero oficial. Todos estamos en esto”, comenta una señora, quien busca evitar represalias en su contra.
Ella cuenta que se utilizaron los mensajes escritos por celular, las llamadas telefónicas e invitaciones personales, como los medios más seguros para invitar a la marcha. El recorrido empezará a las 09:00, en la avenida Imbabura.
“Cerraremos los negocios y recorreremos las avenidas Imbabura, 10 de Agosto, Camilo Ponce…”, asegura un concejal.
Como él, han comprometido su participación representantes de los barrios, de los gremios productivos y de la Policía. Se recomendó que los manifestantes utilicen camisetas blancas.
Lenin Sánchez, jefe (e) del Grupo de Tarea de las Fuerzas Armadas, que tiene a su cargo la seguridad de la provincia, considera positivas las denuncias ciudadanas que permitieron capturar a los supuestos extorsionadores.
“Que la ciudadanía haya denunciado telefónicamente los abusos, demuestra que los habitantes de San Lorenzo están perdiendo el miedo a los delincuentes”.
Recuerda que el amedrentamiento es la fórmula que utilizan los malhechores. En el norte de Esmeraldas, por ejemplo, muchos extorsionadores intimidan a sus víctimas. Ellos se identifican como integrantes de las Águilas Negras, de Colombia.
“Más de una persona ha tenido que pagar por años”, cuenta otro comerciante. También dice que se pagan mensualidades que van de USD 100 en adelante, de acuerdo con el tipo de negocio.
El comandante (e) de la Policía de San Lorenzo, Rommel Navarrete, asegura que tienen identificado el modo de operar de los delincuentes que cobran las mensualidades a los comerciantes.
Según él, de dos a cuatro antisociales ingresan en los almacenes y entregan a los comerciantes un papel con un número telefónico. Antes de marcharse, les advierten que tienen que llamar inmediatamente al patrón.
“Una vez que establecen el contacto telefónico, fijan la cantidad de dinero que deben entregar cada fin de mes, con la posibilidad de incrementos periódicos”, informa Navarrete.
Los comerciantes están dispuestos a perder hoy un día de trabajo. Ellos coinciden en que este es el inicio de una lucha ciudadana en contra del la delincuencia que azota al cantón.