Las familias de Cruz Alto de Miguelillo (Portoviejo) se anegaron entre el martes y miércoles 1 de marzo. Foto: Cortesía de la Secretaría de Gestión de Riesgos
Manabí es la provincia del país que más daños registra desde que comenzó la época invernal. En Los Ríos y El Oro también hay serias afectaciones, por lo cual las autoridades analizan declararlas en alerta naranja.
Manabí registra hasta el momento más de 2 000 familias afectadas, según la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR). A escala nacional, son 4 139 familias.
La noche del martes y madrugada del miércoles 1 de marzo del 2017, las zonas rurales se inundaron por tercera vez. Las anteriores ocurrieron el 8 y 26 de febrero. Las autoridades reportaron problemas en las parroquias Pueblo Nuevo y Calderón de Portoviejo, donde se evacuó a familias a casas acogientes y al refugio del Sindicato de Choferes.
El gobernador de Manabí, Xavier Santos, señaló que el temporal ha causado estragos en 13 de los 22 cantones, principalmente por inundaciones, desbordamientos de quebradas, roturas de caminos de segundo orden, daños en viviendas… Él cree que las declaratorias de emergencia tomadas por los municipios de Portoviejo y Montecristi y la Prefectura permitirán al Gobierno central desplegar su logística para atender futuros problemas mayores.
Chone, Portoviejo, Manta, Montecristi, Sucre, Rocafuerte, Tosagua, Junín, San Vicente, Puerto López, Paján, Pichincha y Jipijapa son los cantones más afectados.
Por las precipitaciones del martes pasado, la SGR reportó hasta la tarde de ayer 150 personas damnificadas, 120 afectadas y 4 viviendas semicolapsadas en las parroquias Pueblo Nuevo y Calderón.
Los inconvenientes más graves sucedieron en el sitio Majagua de Pueblo Nuevo, por el desbordamiento del caudal de la quebrada El Tigre. Eso provocó que al menos 40 familias fueran evacuadas por el Cuerpo de Bomberos y la Policía Municipal, informó el Cabildo de Portoviejo.
Los problemas continuaron, pues se conoció de otros sectores inundados. En el sitio Cruz Alto de Miguelillo de la parroquia Calderón las inundaciones afectaron a 120 familias. El fluido eléctrico se interrumpió y se restableció luego del rescate de los damnificados.
Por la gravedad de los daños, Ricardo Peñaherrera, viceministro de Gestión de Riesgos, explicó que la entidad “declaró la situación de emergencia” para contratar directamente los bienes y asistencia para atender a los damnificados de las cuatro provincias en alerta naranja. Estas son Manabí, Esmeraldas, Guayas y Santa Elena. Hasta el jueves 2 de marzo se prevé incluir a El Oro y Los Ríos.
Otras afectaciones
En Guayaquil, la casa de Otto Batista perdió una de sus paredes debido a la caída de un pesado tronco. Al menos nueve árboles sembrados en la avenida Isidro Ayora, en la ciudadela Sauces, en el norte, se desplomaron el domingo.
Enrique Ponce, coordinador de Gestión de Riesgos en las zonas 5 y 8, explica que los vendavales produjeron la caída de árboles. “Son fuertes vientos que afectan a ciertos árboles que, quizás por su tamaño o su edad, no tienen las raíces debidamente sujetas al suelo”.
Solo el martes la SGR atendió 50 emergencias en Guayaquil: cinco por colapso de viviendas, cuatro inundaciones, 18 por vendavales que causaron el desprendimiento de techos y 23 por caída de árboles.
Desde enero pasado, los informes del Instituto Nacional del Meteorología e Hidrología (Inamhi) reflejan un excedente de lluvias en gran parte de las estaciones del Litoral. Por ejemplo, en el norte de Guayaquil se registraron 402,2 milímetros solo en febrero. El promedio histórico para este mes llega a 332 mm.
La estación de Milagro (Guayas) también registró un incremento. El promedio normal para febrero es 407 mm, pero el mes cerró con 509,4 mm.
En este cantón, el fuerte temporal causó el desbordamiento de los ríos Chimbo y Milagro. El 1 de marzo, algunos sectores bajos, como Venecia y el área cercana al Hospital León Becerra, se inundaron. Cerca, en el cantón Naranjito, el desbordamiento del estero Chorrón encendió las alertas. El caudal descendió la tarde del miércoles, pero dejó una casa afectada.
En otras provincias, Gestión de Riesgos levanta información de daños por inundaciones. Es el caso del cantón La Troncal, en Cañar, donde el desbordamiento del estero Culebrillas anegó varias calles céntricas y colapsó el sistema de alcantarillado. Benjamín Ramírez, encargado de monitoreo de la SGR, dijo que verificaban las afectaciones en el Colegio Julio Matovelle.
En El Oro, específicamente en el sector Río Negro del cantón Santa Rosa, el agua ingresó a algunas viviendas. También, hubo deslizamientos en dos vías del cantón Piñas, que fueron atendidas por el Ministerio de Obras Públicas.