La creciente popularidad de los fármacos semaglutida y liraglutida para diabetes tipo 2 generan preocupación en Ecuador. Estos medicamentos se usan para perder peso, pero su uso indebido llevó a la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) a emitir una alerta. Por otra parte, un estudio de la Universidad UTE arroja más luz sobre efectos y riesgos asociados.
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Los fármacos cuentan con registro sanitario en Ecuador
En Ecuador, por internet y en farmacias, se empezó a vender soluciones inyectables con el principio activo semaglutida, más conocido como ozempic, o con liraglutida o saxenda.
Ozempic ha generado ingresos millonarios a la danesa Novo Nordisk por la demanda que tiene a escala mundial. En Ecuador, su venta está autorizada en presentaciones de 1mg y 0,2/0,5 mg, bajo receta médica, por la Arcsa. La entidad regulatoria emitió su registro sanitario a favor de Leterago del Ecuador en 2021 y está vigente hasta 2026.
Adicionalmente, la Arcsa autorizó, en 2023, la venta de comprimidos de 3 mg de semaglutida o Rybelsus, que también son del mismo fabricante.
La otra solución inyectable y que más se vende en el país es la saxenda. Al igual que ozempic cuenta con registro sanitario hasta el 2026.
Según las indicaciones de este último medicamento está dirigido para mayores de 18 años con un Índice de Masa Corporal (IMC) de 30 o más, o de 27 con problemas de peso.
Entre los problemas están: la diabetes, la presión arterial alta, niveles anormales de grasa en sangre. También inconvenientes respiratorios durante el sueño o apnea obstructiva del sueño; obesidad diagnosticada por un médico y peso corporal mayor de 60 kg.
Publicidad del medicamento saxenda no está autorizado
El problema con estos medicamentos se da por la promoción y venta por redes sociales sin la supervisión y acompañamiento médico. A través de un comunicado, la Arcsa explica que detectó una creciente promoción en Facebook, Instagram y TikTok. Por estas vías se se sugiere su uso para la pérdida de peso estética rápida, sin la prescripción médica.
En consecuencia, la Arcsa advierte que la publicidad del medicamento saxenda no está autorizada por el
acuerdo ministerial 179, por ser un producto biológico, que se vende solo con receta médica.
En el comunicado de la entidad no se menciona la publicidad de ozempic. Este fármaco también se vende por las redes sociales y se promueve su uso para la reducción de peso.
Los efectos de usar estos fármacos sin receta médica
La Arcsa alertó que estos medicamentos no están indicados para cualquier persona que quiera perder peso. Su uso indebido puede incrementar el riesgo de presentar eventos adversos:
Riesgos graves:
- Reacciones alérgicas graves (anafilaxis) como problemas para respirar, hinchazón de la garganta y del rostro y latidos cardíacos rápidos.
- Dolor en el abdomen (área del estómago) intenso y persistente que podría irradiarse hasta la espalda; náuseas y vómitos. Esto podría ser una señal de inflamación del páncreas (pancreatitis).
Efectos muy frecuentes: Náuseas, vómitos, diarrea, estreñimiento.
Síntomas frecuentes:
- Indigestión (dispepsia), inflamación de las paredes que recubren el estómago (gastritis), malestar estomacal, dolor en la boca del estómago, acidez estomacal, sensación de hinchazón, gases.
- Sensación de debilidad o cansancio
- Alteración del sentido del gusto
- Mareos
- Dificultad para dormir (insomnio). Esto ocurre normalmente los tres primeros meses del tratamiento
- Cálculos biliares
- Reacciones en el lugar de la inyección (hematomas, dolor, irritación, picazón y erupción cutánea)
- Los signos de advertencia de bajos niveles de azúcar en sangre aparecen repentinamente. Estos incluyen: sudor frío, piel pálida y fría, dolor de cabeza, taquicardia, náuseas, mucha hambre. También se presentan cambios en la visión, somnolencia, debilidad, nerviosismo, ansiedad, confusión, dificultad para concentrarse y temblor.
- Aumento de las enzimas pancreáticas, como la lipasa y la amilasa.
Estudio de la UTE alerta sobre el uso de estos fármacos
El Centro de Investigación Genética y Genómica de la UTE enfocó su estudio en los mecanismos moleculares de la semaglutida y liraglutida. Ana Karina Zambrano, líder de la investigación, explicó que estos fármacos agonistas del receptor GLP-1 ayudan a controlar el azúcar en sangre. Entre otros beneficios menciona la reducción de peso, mejora de la sensibilidad del cuerpo a la insulina. Esta es la hormona que ayuda a regular el azúcar en la sangre.
La semaglutida y la liraglutida son muy similares al receptor GLP-1, hormona natural en el cuerpo. Cuando los medicamentos se unen a sus receptores ayudan a liberar insulina, reducen la producción de otra hormona: glucagón, que aumenta el azúcar en la sangre. También bajan el deseo de comer y aumenta el gasto de energía, lo que significa que el cuerpo quema más calorías.
Pero alertó que si bien esto es beneficioso para diabéticos y personas con obesidad, está siendo usado indiscriminadamente por personas con sobrepeso, debido a la venta ilegal que se expande por redes sociales. Al igual que la Arcsa remarcó los riesgos que pueden provocar estos medicamentos y añadió que se está estudiando la incidencia en el cáncer de tiroides.
Riesgo de pensamientos suicidas
Zambrano también alerta sobre un reciente estudio publicado en Jama Network Open, en el que se analiza la relación entre semaglutida y liraglutida y la aparición de ideaciones suicidas.
Los investigadores usaron la base de datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre reacciones adversas a medicamentos y realizaron un análisis de desproporcionalidad que reveló una señal significativa de ideación suicida asociada con semaglutida.
Este hallazgo se mantuvo relevante incluso al comparar semaglutida con otros fármacos como dapagliflozina y metformina, así como en pacientes que usaban antidepresivos y benzodiazepinas.
Los resultados mostraron que, entre noviembre del 2000 y agosto del 2023, se reportaron 107 casos de reacciones adversas suicidas con semaglutida y 162 con liraglutida.
La ideación suicida fue la reacción adversa más común asociada con semaglutida, lo que indica un aumento significativo en la probabilidad de reportar este efecto en comparación con otros medicamentos. Además, el análisis reveló que el 62,5% de los casos de ideación suicida se resolvieron tras la interrupción del tratamiento, sugiriendo una posible relación causal.
Acceso y costos de estos medicamentos
Uno de los factores que impulsa el aumento de las ventas de la semaglutida y liraglutida son los costos que tienen en Ecuador y la facilidad de traerlos, desde Colombia.
En Ecuador se puede adquirir la saxenda de 6 mg por 250 dólares, mientras que ozempic sube a 400 y 600 dólares. Estos costos son más bajos que en otros países, como EE.UU.
Esta diferencia de precios ha llevado a muchos ecuatorianos a comprar el medicamento localmente o a traerlo de contrabando desde Colombia, donde también es más accesible. En Internet también se ofertan recetas de ozempic para uno hasta tres meses.
Esta situación plantea un desafío adicional para las autoridades sanitarias, que deben lidiar con el contrabando y la venta ilegal de medicamentos.