Jerusalén, DPA
El prministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el enviado especial estadounidense para Cercano Oriente, George Mitchell, volvieron a chocar hoy en tornoimer a la paralización de los asentamientos y abandonaron su reunión en Jerusalén sin alcanzar un acuerdo.
Ambos mandatarios, que se reunieron hoy por segundo día consecutivo en una maratoniana ronda de negociaciones entre Estados Unidos y sus interlocutores israelíes, palestinos y del resto de países árabes de la región, decidieron volver a encontrarse el próximo viernes.
Tras visitar mañana a los líderes de Jordania, el Líbano y Qatar, Mitchell volverá a Israel el viernes para tratar de ultimar un acuerdo con Israel que permita un acercamiento a los palestinos y la celebración de un encuentro tripartito junto con el presidente estadounidense Barack Obama la semana próxima en Nueva York.
Tanto Netanyahu como la Administración estadounidense ven la celebración de la Asamblea General de Naciones Unidas como el marco ideal para el relanzamiento del diálogo entre israelíes y palestinos y la posible reanudación de las negociaciones de paz, paralizadas desde diciembre pasado.
Sin embargo, las partes tienen que limar todavía sus posiciones para confirmar la celebración del esperado encuentro: ni Israel parece dispuesto a paralizar totalmente la construcción de colonias judías en territorios ocupados palestinos, ni los palestinos se sentarán frente a Israel hasta que escuchen un compromiso para la “completa congelación de los asentamientos”.
Netanyahu ha insistido en aclarar que su gobierno no accederá al completo cese de las construcciones como exigen los palestinos y Estados Unidos: “El congelamiento no llegará”, dijo este lunes, recordando que Israel ya tiene todo listo para comenzar y seguir adelante con 3 000 nuevas viviendas en territorios de Cisjordania.
Tras abandonar su reunión del martes sin poder cerrar el esperado acuerdo, Israel y Estados Unidos volvieron a intercambiar hoy puntos de vista tras la visita de Mitchell a Ramallah, donde escuchó los reclamos de la contraparte palestina.
Todo apunta a que el compromiso que Estados Unidos puede arrancar de Israel no irá más allá de “reducir” las construcciones y que, además, lo hará de forma “limitada” en el tiempo.
Por el momento, las palabras “moratoria” o “congelamiento” parecen ser un tabú en las reuniones de Israel con sus interlocutores estadounidenses y se habla de una paralización temporal de las construcciones durante seis meses. Mitchell volverá a reunirse esta tarde con los líderes palestinos en Ramallah antes de iniciar su gira por los países árabes de la región.