Redacción Cuenca
El Comité de Empresa de la Compañía Ecuatoriana del Caucho (ERCO) entregó ayer la planta industrial de Cuenca. Las carpas donde dormían los empleados, que se mantuvieron en huelga durante 57 días desde el 8 de octubre, ya no estaban.
Los patios lucían expeditos y por ellos solo caminaban los directivos del Sindicato acompañados por representantes del Ministerio de Relaciones Laborales. La idea era verificar que todos los sellos colocados para resguardar las instalaciones estén intactos.
Diez sellos, según Antonino Alarcón, inspector de Trabajo, fueron verificados y “se constató que ninguno estaba alterado”. Luego de esto, unos 200 empleados que se encontraban en el lugar durante el proceso salieron de la planta gritando y aplaudiendo.
Así demostraban que están satisfechos con el dictamen del Tribunal de Conciliación que decretó a la huelga como lícita. De las cinco peticiones por las que se inició la medida solo se aceptó una, relacionada con un pago retroactivo desde 2008.
Luego de esto, los directivos del Sindicato extendieron la mano al viceministro de Trabajo, Francisco Vacas, y abandonaron la planta. Antes de salir, cerca de las 11:40, Patricio Ortiz, abogado del Comité, señaló que “mañana ya habrá llantas y así termina el paro”.
Ortiz aseguró que las personas que estaban en paro, es decir los alrededor de 450 trabajadores del Comité, inician sus labores hoy en la llantera. “Desde el primer turno empezamos a trabajar”, es decir desde las 06:00”.
César Padilla, secretario general del Comité, dijo que estarán vigilantes ante el rumor de que se puedan despedir a trabajadores que estuvieron en la medida. “En caso de que eso suceda retomaremos la paralización”.
Mientras que el viceministro Vacas dijo que no es recomendable que se presenten provocaciones como estas porque afectan a la relación entre las partes.
Luego de que el Ministerio de Relaciones Laborales recibiera la planta por parte del Comité, esa Cartera de Estado la entregó a sus directivos. Después de recibirla, Darwin Zabala, vicepresidente de Finanzas de la compañía, dijo que está en buen estado.
“Esperamos que en el menor tiempo posible podamos recobrar la producción que teníamos antes del paro, es decir de 6 000 llantas al día”, dijo el ejecutivo. El encendido de la planta toma unas 24 horas y se espera que hoy ya se empiece a producir.
Asimismo, reconoció que lo primero que se hará es abastecer al mercado local para luego de eso reanudar con las exportaciones a los países de la Región Andina y a Chile. Pero reconoció que, mientras se recobra la producción, se continuará importando llantas desde las plantas de Brasil, México y Estados Unidos.