Redacción Manta
La tarde y noche del miércoles, las calles altas de Montecristi lucieron coloridas. Los propietarios de las viviendas, ubicadas en las arterias 10 de Agosto y 4 de Julio, decoraron las fachadas de sus casas.
Muchos hicieron una especie de altar con cintas multicolores y globos, y en el centro la estampa de la patrona de la ciudad, la Virgen de Monserrate. A las 17:00, empezó el recorrido con la imagen. Partió desde la basílica de Monserrate, ubicada en el centro de la urbe.
La agenda
Mañana salen en peregrinación los pobladores de la parroquia La Dolorosa, se prevé que caminarán unas 2 000 personas. El recorrido se iniciará a las 16:00 y culminará en la Basílica de Montecristi. Son 15 kilómetros.
El domingo se termina la ubicación de los juegos mecánicos. Están en las calles aledañas al parque central.
El próximo martes sale la caminata de los jóvenes católicos desde Portoviejo. Se estima que en ella participen 4 00 personas. Son 21 kilómetros.
Niños, jóvenes y adultos se unieron al recorrido. Justino Anchundia, junto con otros 20 voluntarios, son devotos de la santa. Ellos cargan la imagen, cada noviembre, desde hace 15 años.
“Estuvimos puntuales, desde las 16:00. Esperamos que los sacerdotes nos den la orden para sacar a la virgen desde su sitio de estadía, que está en la parte más alta del templo”, contó Anchundia.
Con mucho cuidado, cuatro hombres, entre ellos este devoto, movieron con detenimiento la escultura religiosa. Luego de salir del templo, la ubicaron en el interior del balde de un camión mediano. Esa parte del automotor estaba decorada con ramos de rosas, manteles blancos y globos.
El párroco de Montecristi, Ángel Toaquiza, se ubicó frente al tumulto y levantó su brazo derecho. Esa fue la señal que todos esperaban para iniciar con el recorrido. “La peregrinación es la mejor forma de enviar un mensaje a los creyentes de la Virgencita”, decían quienes avanzaban tras la imagen. Algunos fieles llevaron flores, velas y acompañaban con cánticos y rezos.
Ochenta misas se celebrarán hasta el 21 de noviembre, día de la procesión más grande. 25 sacerdotes serán los encargados de oficiar las misas y ceremonias religiosas, que empezarán desde las 05:00 hasta las 22:00.
Manuel Macías, un seguidor de Monserrate, cree que estas fiestas son especiales este año. “Estamos atravesando por una crisis económica muy fuerte, a ello se suman los racionamientos de energía, eso mermará en parte la llegada de los feligreses a la ciudad”.
Los comerciantes que organizan la feria popular terminaron ayer de instalar sus negocios en las calles. Ellos se ubican en la avenida Metropolitana, hasta las calles que rodean a la Basílica. Toaquiza está preocupado: la feria produce contaminación ambiental y auditiva.
En el Municipio, los funcionarios analizan alternativas para recoger la basura que se genere durante estas celebraciones. La Policía, por su parte, garantiza la seguridad, para ello aumentó 30 efectivos a los nueve existentes. Ellos estarán hasta el 22 de este mes.