Redacción Loja
La Feria Internacional que finalizó ayer en Loja su decimoctava edición, no cubrió la expectativa de los expositores que por 15 días ofertaron sus productos en el recinto ferial Ciudad de Loja.
De acuerdo con los comerciantes, las ventas con respecto al año anterior disminuyeron entre el 10 y 20%. Por ejemplo, Victoria Maqqueramos, expositora de textiles de la fábrica Gamarra de Lima (Perú), invirtió USD 4 000 en textiles. Hasta el sábado pasado sus ventas totalizaron USD 2 800. En tanto que el año pasado de esa misma inversión vendió USD 3 600.
Maqqueramos no sabe las razones por las cuales sus productos se vendieron menos que el año pasado. Pero, cree que fue evidente la falta de dinero en los clientes. “A muchos no les alcanzaba el dinero para comprar una prenda. Por eso decidí vender a plan acumulativo”. Siete clientes compraron de esta forma.
El piurano Willian Córdova, dice haber vendido apenas USD 1 250 de una inversión de 3 000 que hizo para la feria en cobijas de lana de alpaca. El año pasado trajo la misma inversión y vendió USD 2 000. “Las utilidades no superan los USD 500. Pero de ahí se cancela el puesto, la alimentación y la estadía”.
El establecer contactos de negocios es también el propósito de los comerciantes peruanos que participan en la feria. Así se pueden intercambiar ideas y productos con otros países.
Los expositores ecuatorianos también se quejaron de las bajas ventas. Por ejemplo, la expectativa de Jéssica Santos, de Latacunga, fue vender USD 1 000 en ropa para niño y artesanía. Pero apenas logró vender USD 250.
“En 2007 también vine a esta feria, pero vendí el 80% de mis productos”. María Cuenca, expositora lojana de la línea Horchata Lojana, reportó ventas por USD 150 cuando su proyección fue vender USD 250.
En la feria participaron alrededor de 450 expositores. La mayor parte de ellos son pequeños comerciantes. Según el gerente del Comité de Ferias de Loja, Fabián Coronel, el 40% de esos promotores provienen de otras provincias y de otros países, principalmente de Perú.