En Copenhague, cada país llegó con sus propuestas y planteamientos. Brasil destinará unos USD 580 millones anuales, procedentes de la explotación petrolera, para financiar programas de preservación ambiental, informó el Ministerio de Medioambiente.
El gobierno estadounidense indicó ayer que empezará a regular las emisiones de dióxido de carbono (CO2), tras clasificarlas como dañinas para la salud pública, esquivando a un Congreso dividido y dando una señal para estimular las negociaciones sobre el clima en Copenhague. La decisión prepara el camino para que la Agencia de Protección Ambiental establezca los estándares sobre cuánto CO2 pueden emitir las fábricas, edificios y autos, pese a que el Congreso aún debe pronunciarse sobre la ley respectiva.
Y el presidente Hugo Chávez aseguró que Venezuela también reconoció su responsabilidad en el calentamiento del planeta.