Alfredo Aguilar
La convocatoria de Carlos Vera para combatir la Ley de Comunicación dejó al descubierto el hastío de los quiteños no solo por esa Ley sino la corrupción, la prepotencia y abuso, el gasto público desmesurado, el acaparamiento de poder, las emergencias de contratos a dedo, la entrega del campo Sacha a PDVSA, el regalo del campo Palo Azul, el llevar a nuestro país al comunismo, la crisis eléctrica y una lista interminable que no frena la lengua del Mandatario en su intento de convencer al pueblo de su “magnífica” gestión.
En esa convocatoria también se planteó la revocatoria del mandato, con la cual se observó que el pueblo no comparte dicha propuesta.
Esa es la verdadera esencia de la democracia, hacer lo correcto y a tiempo.
Cuando las pruebas en contra son plenas y abundantes no se le puede dar la oportunidad de burlar la ley y con su influencia continuar violando inmisericordemente nuestros derechos.