Un total de siete niños murieron en el cantón Taisha, ubicado en la provincia de Morona Santiago. Son habitantes de comunidades shuar asentadas en la cordillera del Trans Cutucú, en los límites con Perú.
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La muerte de siete niños, en Taisha
El número de fallecidos fue ratificado este viernes 25 de abril de 2025 por la coordinadora Zonal 6 del Ministerio de Salud, Andrea Durango. Según ella, los niños tenían entre cinco y 13 años.
Los síntomas que se han presentado son principalmente gastrointestinales, deshidratación, y en algunos casos, neumonía.
Los afectados habitan los poblados de Pampants/ Tuutinentsa y Mashuim – Keserua, Karakam / Pumpuentsa, Wampuik / Huasaga y Surik Nuevo Huasaga.
Son comunidades a las que se puede acceder, principalmente, por vía aérea.
Los primeros casos en Morona Santiago
Durando dijo que las causas de las muertes aún no están determinadas. Se estima que los primeros casos de la enfermedad aparecieron entre febrero y marzo de 2025. Sin embargo, se conoce de uno que habría ocurrido entre noviembre y diciembre de 2024.
La doctora Durango estuvo en el hospital de Taisha el jueves 24 de abril de 2025. Ella dijo que se tomaron muestras de los niños que están enfermos y que fueron trasladados mediante avionetas desde sus comunidades hasta este hospital.
Los resultados de esas muestras se prevé que estarán listos este viernes 25.
Las investigaciones de las causas
Durango indicó que el personal de la Agencia de Regulación y Control del Agua estuvo en Taisha junto con el equipo de vigilancia epidemiológica.
Ellos tomaron las muestras de las vertientes de agua en las comunidades afectadas. “En aproximadamente 15 días tendremos resultados. Mientras tanto, necesitamos el apoyo de la Prefectura (Morona Santiago) y de los líderes comunitarios para continuar con este trabajo conjunto”.
Se refiere al trabajo entre los médicos del Ministerio de Salud, autoridades locales, líderes indígenas y shamanes. Durango indicó que la Secretaría Técnica Ecuador Crece sin Desnutrición Infantil analiza la alimentación en esas zonas. También, se tomaron muestras de las colaciones escolares.
“Respetamos la cosmovisión y las prácticas culturales, pero también es crucial que los pacientes acudan a los centros de salud a tiempo. Muchas veces nos avisan cuando ya es muy tarde” dijo Durango.
Ella pidió que lo habitantes de esos poblados no consuman agua directamente de vertientes sin que sea tratada, “al menos hasta que tengamos resultados oficiales. Si en 15 días se confirma que el agua no es la causa, será un alivio, pero por ahora debemos prevenir”.
De forma paralela, Durango dijo que trabajarán con los promotores de salud intercultural para promover medidas como el lavado de manos, sobre todo, en lugares donde no hay agua potable.
Un trámite legal para una autopsia
Otra de las acciones fue solicitar -mediante la Fiscalía– que se practique una autopsia a uno de los últimos niños fallecidos. La intención es determinar las causas del deceso y encontrar cuál es el origen de la enfermedad.
Según Durango, el equipo médico está considerando la hipótesis de una posible contaminación. “Una vez tengamos resultados oficiales, los informaremos. Hasta ahora, algunas pruebas de malaria han dado negativo, pero cada caso es distinto y no podemos dar detalles de cada paciente individualmente”.
