La Policía Nacional se puso en alerta máxima apenas se conoció que el juez Jorge Aldas Macías, de la Unidad Especializada de Garantías Penitenciarias de Guayaquil, ordenó la liberación de Junior R., cabecilla de una banda criminal organizada.
El eje preventivo de la Policía Nacional y la Unidad de Inteligencia conoció que un grupo armado de la banda de Junior R estaba preparando para trasladarlo a su domicilio, lo que en términos de seguridad se conoce como una cápsula de seguridad.
Fue entonces que se armó un operativo que tenía un antes, un durante y un después.
Los jefes policiales convocaron a cuerpos de élite para montar los operativos y se esperó. A la tarde comenzaron a rondar la Penitenciaría del Litoral vehículos de alta gama, muchos blindados. La característica general era que los vehículos tenían los vidrios oscuros y no se podía identificar a los miembros.
El seguimiento se realizó con personal en tierra y por el sistema de cámaras del ECU 911.
Definen intervención
Mientras se tramitaba la liberación de Junior R., los jefes policiales de las Zonas 8 y 5 planificaron el punto donde harían el punto de control. El nivel de alerta se elevó al reportarse que en algunos de los vehículos que se ubicaban en los alrededores de la penitenciaría se encontraban personas con armas de alto calibre.
Se definió establecer el punto de control en la urbanización Málaga de la parroquia La Aurora en Daule.
Cuando salió el detenido, se le dió seguimiento. Apenas llegó al punto la cápsula de seguridad de Junior R. y al verse descubiertos, los antisociales lanzaron una granada en contra de los uniformados, la que no estalló. Los policías respondieron el ataque. Tras el enfrentamiento se detuvo a 37 personas, 18 de las cuales tienen antecedentes criminales.
Entre los detenidos había dos extranjeros, un menor de edad, un miembro activo de la Armada del Ecuador y un militar en servicio pasivo.
En poder de los detenidos se encontró un arsenal compuesto por tres fusiles, 10 pistolas, una subametralladora, dos revólveres, un lanzagranadas, cinco granadas tipo limón, tres granadas de fragmentación, alimentadoras, municiones, chalecos antibalas, celulares, vehículos de alta gama y dinero en efectivo.
Los detenidos y las evidencias fueron puestos a órdenes de la Fiscalía.
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