Entre sábado 20 y el domingo 21 de febrero de 2021 se registraron 1 576 nuevos casos de covid-19 en Ecuador. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
En Ecuador, el número de contagiados hospitalizados -entre estables y con pronóstico reservado- ha tenido variaciones. Hasta el viernes 19 se reportaron 1 166 personas ingresadas en los sanatorios del país, es decir, 173 menos de lo registrado el mismo día de enero, con 1 339.
Pero si se compara la primera cantidad con igual fecha de diciembre se puede ver un incremento del 44,7%.
Así, el 19 de diciembre hubo 806, es decir, 360 menos de lo reportado el viernes 19 de febrero. Los datos constan en los informes publicados por el Ministerio de Salud Pública (MSP).
En el documento además se observa un detalle sobre el estado de los pacientes internados. Hasta la semana anterior hubo 668 personas que ingresaron a los hospitales, pero su condición era estable o desarrollaron un cuadro moderado de la enfermedad covid-19.
Mientras que quienes entraron con complicaciones graves -pronóstico reservado- alcanzaron las 498 personas.
Carlos Nieto, internista del Hospital Metropolitano de Quito, subraya que en las últimas semanas han ingresado pacientes más jóvenes. Sus edades oscilan entre los 20 y 40 años. “Ellos han presentado dificultades para respirar; incluso, han llegado sin comorbilidades, es decir, sin enfermedades preexistentes”.
Otra de la novedades -comenta Nieto- es que los pacientes han desarrollado síntomas de forma más rápida. Antes se hablaba de que los problemas aparecían a partir de los siete días; hoy se presentan a los tres días (72 horas).
En esta casa de salud aún hay disponibilidad de camas: de los 17 espacios libres en hospitalización, siete están ocupados. Y en la unidad de cuidados intensivos (UCI), tres de los seis sitios están llenos.
En la Clínica Internacional, en Quito, se vive una dinámica similar. Estuardo Salgado, intensivista, coincide en que la mayor cantidad de hospitalizados es adulto; incluso ciudadanos de 30 años.
La mayoría llega con cuadros respiratorios graves, por lo que terminan en neumonía y dificultades para respirar, así que son remitidos a UCI .
En algunos casos -anota- las personas acuden muy tarde a los servicios médicos, ya sea porque temen ingresar a los sanatorios o porque se han controlado con medicamentos.
Esto no es aconsejable, ya que se requiere un chequeo médico para dar tratamiento oportuno, cuenta.
Hasta el viernes, las 12 camas de terapia intensiva estaban ocupadas. Mientras que el 70% de los 25 de hospitalización estaban llenos: 18 lugares.