Alrededor de 84 millones de electores estaban llamados a las urnas en estas elecciones de la primera economía de África y primer exportador de petróleo del continente. Foto: AFP
Los nigerianos se despertaron este sábado, 16 de febrero de 2019, con una mezcla de decepción y cólera después de que la Comisión Electoral Nacional anunciara por sorpresa el aplazamiento de las elecciones presidenciales, a pocas horas de la apertura de los locales de votación.
Los comicios están ahora previstos para el próximo sábado, 23 de febrero, según la Comisión Electoral Nacional (INEC) , que alegó problemas logísticos tras una reunión de urgencia en plena noche.
Los dos principales partidos del país, el Congreso de Progresistas (APC, en el poder) y el Partido Popular Democrático (PDP) , condenaron este inesperado cambio.
El sábado por la mañana, el presidente saliente Muhamadu Buhari, candidato a la reelección, instó a los nigerianos a abstenerse de “cualquier desorden civil y a mantenerse pacíficos, patrióticos y unidos ”.
“Estamos conmocionados (…) no se aplazan unas elecciones justo unas horas antes ” de comenzarlas, declaró por su parte el candidato de la oposición, Abubakar Atiku, del PDP, quien también pidió a sus seguidores que mantuvieran la calma.
En Port-Harcourt, en el sureste del país, electores que todavía no sabían la noticia se presentaron en los colegios electorales, que tenían que abrir a las 08:00 locales (07H00 GMT) .
“Estoy indignado (…) ¿Por qué no anunciaron este retraso antes? ¿Por qué anunciarlo en plena noche? ”, declaró a la AFP Chidi Nwakuna, un empresario de 51 años convencido de que se trata de una maniobra del gobierno para “ amañar las elecciones ” .
Más de 84 millones de electores estaban llamados a las urnas en estas elecciones de la primera economía de África y primer exportador de petróleo del continente.