Ramiro Noriega, rector de la Universidad de las Artes, se refirió a la disolución de la Comisión Gestora de la institución luego de una rendición de cuentas. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Con una proyección de unos 1 300 estudiantes para el semestre que inicia en mayo próximo, la Universidad de las Artes (UArtes) se propone consolidar este año el campus sur de la Plaza de Artes Oficios (PAO), donde funciona el adscrito Instituto Superior Tecnológico del Ecuador (ITAE).
El aumento de la población estudiantil es uno de los retos de este 2016, pues la universidad contó hasta el semestre pasado 706 estudiantes en sus cinco escuelas y 145 en nivelación, mientras que entre mayo y septiembre tendrá 1 041 en las escuelas y 255, en nivelación.
El desarrollo del plan maestro de la entidad significa también avanzar hacia la oferta maestrías, según indicó la mañana de este jueves 24 de marzo el rector Ramiro Noriega, en la rendición de cuenta de la institución pública.
Acuerdos de inscripción con el ITAE y con la Sinfónica de Guayaquil le permitirán a la universidad comenzar a trabajar este año en infraestructura en el Teatro Centro Cívico de la PAO, ubicado al sur de la ciudad, también conocido como Parque Forestal.
“Hemos tomado de manera inmediata otra medida, estamos acordando con el Museo Antropológico y Arte Contemporáneo (Maac) el uso de su edificio de laboratorios, un espacio pensado desde un inicio como una escuela museable, diseñado para la educación, investigación y practicas artísticas”, explicó Noriega.
La escuela de artes visuales, que con el ITAE tuvo a estudiantes en el sur, pasará a funcionar en el Maac, en el centro, más cerca de los museos y de las colecciones, según el plan maestro universitario.El presupuesto de la entidad, que en siete meses año del pasado superó los USD 8 millones, bordea este año los USD 13 millones.
Pendiente la Comisión Gestora
La Universidad se quedó a finales de enero pasado sin tres de los cuatro miembros con voz y voto en la Comisión Gestora, la máxima autoridad del centro de educación superior, y cuyo reemplazo espera por un decreto presidencial.
Ramiro Noriega, elegido por la Comisión como rector, negó que haya existido falta de participación de los miembros del cuerpo colegiado, quienes a su salida acusaron poca capacidad de maniobra. Y denunciaron una creciente socavación en la definición de políticas y en la toma de decisiones.
“Está comisión se reunió en promedio tres veces por mes, lo que se compara con el funcionamiento de otros espacios colegiados, hubo un trabajo sostenido importante. El 99,99% por ciento de las decisiones se tomaron de manera unánime”, dijo Noriega.
El rector valoró el trabajo del cuerpo colegiado como “sustancial” y agregó que la participación de los miembros permitió que se establecieran estatutos, reglamentos y mallas curriculares. “Pero no solo es la Comisión Gestora sino toda la comunidad universitaria la que tiene que participar del proceso de gestión y en la elaboración del plan maestro”, dijo.