Blanca Graciela Durán Izurieta
Cuando los gobernantes se sirven del poder y se vuelven dictatoriales rompen el Estado de Derecho y los pueblos y sus instituciones los botan: Bucaram, Mahuad y Gutiérrez.
Indigna escuchar a Ortega y Chávez amenazar con un conflicto internacional. Chávez es el “goriletti” que dio golpe de Estado y patentó su “monarquía indefinida,” causa de la violación en Honduras.
Castro y los del Alba defienden al “amigo y su modelo,” no la democracia que no practican. A Chávez sólo le falta cerrar Globovisión para ser única voz de su hacienda, Correa y los Kirchner siguen sus pasos silenciando a la prensa y personas de pensamiento libre.
Quieren convertir la América en la gran Cuba comunista fáctica que Chávez dice “es la mejor democracia”, ni Los Simpsons dicen semejante cosa. Castro, Chávez y compañía no deben hablar de orejas cuando las tienen bien grandes. Ecuador y el mundo deben estar alertas de este despropósito.