Río de Janeiro. Reuters
La posible entrada del presidente de Estados Unidos Barack Obama a la carrera para la candidatura de Chicago como sede olímpica 2016 está en el ojo de las autoridades brasileñas, que apuestan al prestigio del Luiz Inacio Lula da Silva para potenciar a Río de Janeiro.
Un portavoz de Obama dijo el jueves que es posible que este viaje a Copenhague para la votación del Comité Olímpico Internacional (COI) el 2 de octubre, agregando un nuevo componente a la disputa, luego de que el Mandatario descartara seguir la sesión del COI para dedicarse a la reforma del sistema de salud estadounidense.
“Estamos bien, pero ese ‘lobby’ de Obama no estaba en los planes y desconocemos lo que pasará”, dijo a Reuters una fuente del Palacio Guanabara, sede del Gobierno estatal de Río.
Obama, que según los planes oficiales será representado en Copenhague por su esposa, Michelle, entró con más ahínco en el proceso de votación olímpica en las últimas semanas, cuando envió cartas a los miembros del COI declarando su apoyo a Chicago, su cuna política.
El ministro de Deportes de Brasil, Orlando Silva, que la semana pasada dijo que la ausencia de Obama en la votación sería sentida por la candidatura estadounidense, defendió el papel ejercido por Lula para la candidatura de Río. “Imagino que el presidente Lula tiene un prestigio en el COI y dimos buenas garantías del proyecto al comité”, declaró a Reuters. Chicago y Río compiten con Madrid y Tokio.